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La tensión entre manteros y policías se trasladó en la noche del miércoles a Calafell cuando los vendedores intentaron plantar sus productos en el paseo marítimo y un cordón policial se lo impidió.
La amenaza de los manteros de que se colocarían igualmente hizo temer una reacción violenta y se solicitaron refuerzos a los Mossos d’Esquadra, que acudieron con dotaciones antidisturbios.
Los Mossos tenían en ese momento desplegado un gran dispositivo preventivo en Coma-ruga debido a los enfrentamientos entre agentes del cuerpo y manteros que se produjeron en la noche del martes, por lo que llegaron en pocos minutos.
Sin embargo, el miércoles el número de vendedores en Coma-ruga se redujo y no hubo incidentes. Pero los manteros se desplazaron a Calafell con la intención de llegar al paseo marítimo.
En el encontronazo con la Policía Local hubo momentos de tensión verbal pero sin choque físico, como sucedió en Coma-ruga. Los manteros optaron por retirarse y no llegaron a extender las mantas.
Verano caliente
Pero en las localidades del Baix Penedès se espera un verano caliente. Se teme especialmente el hecho de que desde hoy viernes el Ayuntamiento de Barcelona impulsa un dispositivo de control al top manta que satura la zona del Port Olímpic y que ello genere un desplazamiento de los vendedores a municipios de la costa del Penedès.
Desde la Policía Local de El Vendrell ya se explicó que ante la previsión de ese desplazamiento mantero se habían incrementado los controles en las entradas de la localidad y que de momento no se había detectado la presencia de más vendedores.
Ayer en Sabadell se celebró un encuentro de autoridades políticas y policiales precisamente para analizar cómo abordar los próximos meses. Fuentes policiales locales presentes en la reunión explican que lo esencial es una coordinación estrecha para evitar, entre otras cosas, que los manteros se coloquen en calles que son frontera entre municipios para evitar ser perseguidos por los cuerpos locales cuando cruzan al pueblo vecino.
Competencias
En este caso los ayuntamientos reclaman una mayor implicación de los Mossos d’Esquadra. Sin embargo, las asociaciones de comerciantes que sufren la competencia ilegal tampoco entienden por qué en la persecución de un mantero la policía local de un municipio no puede actuar en el colindante.
Los comerciantes reclaman que si se establece una acción coordinada podrían llegarse a acuerdos de colaboración. En el enfrentamiento del martes en Coma-ruga, cuando los Mossos pidieron refuerzos acudieron patrullas de la Policía Local de Calafell.
