Moritz Vendrell. Ángel Rodríguez. 'Soy inocente, no hay más'

- Soy una persona que me quedo para mí mis problemas. Me los voy comiendo hasta que exploto. En cambio mi mujer es distinta, cuando hay algo lo quiere solucionar al momento. Siempre hay algún rato de soledad, pero me he sentido arropado en general.

- ¿Cuántas horas invirtió en investigar sobre la dichosa metilhexanamina?

- Al principio muchas. Imagínate. No paraba de mirar por internet, de estudiar otros casos. Quería saber qué era exactamente ese producto que decían que me había tomado y que yo ni siquiera sabía que daba positivo.

- Pero... ¿Ángel Rodríguez cómo se entera del positivo?

- Justo un mes después de la Copa del Rey de Lleida, en 2014. Pasé el control tras la semifinal ante el Reus. Estaba en mi casa y me llegó una carta de la Agencia Anti Dopaje. Me acuerdo que, en tono de broma, le dije a mi mujer: «¿Te imaginas que he dado positivo?». Cuando leí la carta no me lo podía creer.

- ¿Qué hizo?

 Para mí todo era nuevo. Empecé a informarme por internet y tenía claro que para demostrar mi inocencia necesitábamos analizar el producto. Por lo que leí, éstos productos no sólo llevan las sustancias que indica la etiqueta. Nunca he sido de ir al gimnasio y de estar enteredo de este tipo de cosas. Me encontré con un mundo nuevo y lo pasé fatal.

- ¿Impotencia es la palabra?

 Claro. Me he quedado con la sensación de que me han metido en el mismo saco que cualquier otro deportista que cobra mucho más que yo y que practica otro deporte más profesional. En mi opinión deberían analizar la situación y el momento de cada deportista. Ya sé que la ley es para todos igual, pero yo no he pedido que me quiten la sanción, simplemente que me escuchen. Me hubiera gustado que me dieran la oportunidad de explicarme.

- ¿Cuándo asumió que los dos años de sanción son inamovibles?

 Pues hasta no hace mucho. Quería pensar que por lo menos me rebajarían, pero vas viendo que el esfuerzo que hemos puesto todos, también El Vendrell, y los recursos no fructifican. Al final te resignas y ya lo tengo asumido. Estoy muy agradecido al Mortiz Vendrell, que me renovó cuando sabía lo que me iba a ocurrir.

- Dice en la carta que se siente orgulloso de su carrera.

Sé que he quedado manchado por esto. Este caso ha llegado a países como Italia o Francia en los que tengo excompañeros que me han preguntado. Incluso, al principio, se especuló con barbaridades. En este sentido estoy tranquilo, porque soy inocente, no hay más. Y sí, estoy orgulloso de mi carrera y siempre iré con la cabeza alta.

- El reconocimiento que ha recibido del mundo del hockey en general, ¿es su mayor logro?

Mira, mi padre, como yo, es un apasionado de este juego. Lo ha pasado horrible. Verle llorar de alivio con las muestras de cariño y apoyo por las redes sociales y de forma personal le han calmado. En este sentido estoy muy agradecido, porque la gente que me conoce sabe que ganar una Copa del Rey para mí no es una cuestión tan vital como para llegar al extremo de doparme.

- Y a sus hijos, Ángel y Dídac, ¿cómo se les explica  que papá no puede jugar?

Porque papá ya es mayor. El otro día, cenando con Ángel y mi mujer, le pregunté. «Tú por qué crees que papá no juega?». Él me respondió: «Porque ya eres mayor». Ángel juega en el Noia y le encanta el hockey.

- Dentro de un año y cinco meses, ¿volveremos a verle por las pistas?

Ahora dejo el Mortiz Vendrell y necesito desconectar. En mi vida deportiva he tenido que superar muchos caminos de piedras y no sé si voy a poder con éste. Claro que me encantaría que hubiera una propuesta encima de la mesa y poder retirarme de forma digna, escogiendo yo el momento. Veremos lo que ocurre. Ahora deseo invertir el tiempo en mi familia y agradecer a todos los que han estado a mi lado.