Paula Curto, la lanzadora letal

Letal en el lanzamiento de media y larga distancia, Paula Curto es una de las mejores representantes surgidas de la cantera del baloncesto ebrense. La jugadora ampostina, que cumplió 21 años el pasado mes de julio, lleva desde los 16 en las filas del equipo femenino del FC Barcelona. 

La joven se formó en el Club Bàsquet Amposta de los 7 a los 14 años, después de haber probado diferentes deportes. Hasta los 16 años y durante dos temporadas estuvo en las filas del CB Tarragona, y después llegó la oferta del Barça que no dudó en aceptar: «tenía muy claro que quería competir en un Campeonato de España de clubes y estaba dispuesta a realizar cualquier sacrificio para lograrlo, ya que había jugado los estatales de selecciones pero nunca de clubes». En aquella época, la ebrense estaba en el CBT y no consiguieron clasificarse. 

Cuando terminaron  la temporada le llamaron del Barça explicándole que el club empezaba de cero tras la desaparición unos años antes de la sección femenina de baloncesto, y que querían que formase parte del nuevo proyecto. Paula explica  que «me reuní con ellos y llegamos a un acuerdo». 

Ahora, la del Montsià compagina el baloncesto con sus estudios por las mañanas de Relaciones Laborales en la Universidad de Barcelona. Las tardes las dedica a entrenar con el Barça y a un equipo de la escuela de baloncesto de Sant Feliu de Llobregat.

Paula reconoce que para ella jugar en el club azulgrana es una motivación añadida: «siempre he sido muy seguidora del Barça y tengo todas las camisetas desde que era pequeña. A parte, mi abuelo (Enrique) ha sido y es muy culé y desde muy pequeña que me ha hecho sentir barcelonista». 

Para la jugadora ampostina es todo un orgullo poder llevar la camiseta blaugrana: «cualquier niño o niña sueña con ponerse esta camiseta y para mí es todo un orgullo, porque significa que represento al mejor club del mundo. Además, desde pequeña ha jugado también con la Selecció Catalana y la Selección Española, lo que demuestra su tremenda calidad.

Paula apunta que «este año contamos con un equipo con un promedio muy bajo de edad, donde las jóvenes tendremos un papel muy importante. El objetivo es ser un bloque fuerte capaz de competir y ganar a cualquier equipo de España. El ascenso es un premio que el equipo más regular, ambicioso y trabajador termina obteniendo, y espero que en el futuro podamos ser nosotras».

La ampostina intentará colaborar en la progresión de un conjunto que se ha reforzado con jugadoras jóvenes, pero de gran proyección, como Beatrice Carta y Lola Pendande. 

Cabe destacar que el Barça debutará en la LF-2 el 10 de octubre en el pabellón Juan Carlos Navarro de Sant Boi de Llobregat, donde juega como local, recibiendo al Añares Rioja ISB.

Aspectos que quiere mejorar

Paula piensa que en el aspecto personal aún tiene bastante margen de progresión: «me he marcado como objetivo principal mejorar el físico. Además, en los aspectos relacionados con la pista, siempre quiero mejorar aquellas cosas que me cuestan y consolidar aquellas que se me dan bien. Soy consciente de mis aspiraciones y tengo muy claro que quiero mejorar para llegar al máximo posible a nivel individual y poder ayudar al equipo». La joven no se ha planteado hasta cuando puede seguir jugando: «pienso sobre todo en disfrutar de lo que hago, y cuando no disfrute jugando lo dejaré, pero de momento me motiva el baloncesto y me lo paso muy bien».