La maquinaria ha empezado a trabajar en la construcción del conocido como carril bici de Blancafort. La previsión es que el nuevo vial acabe enlazando Reus con Cambrils, a lo largo de toda la carretera TV-3141. Pero, por ahora, los trabajos se centran en dos tramos: entre la rotonda de la T-11 y la urbanización Blancafort (plazo de ejecución de cinco meses), y su continuidad hasta Les Palmeres d’Aigüesverds (diez meses). En total, 2,3 kilómetros que se ejecutan por 2,9 millones de euros.
De momento, los operarios están realizando los primeros movimientos de tierra, ganando terreno para poder ensanchar la actual vía y, así, encajar el carril bici. Éste será de doble sentido y estará ubicado en el arcén norte de la carretera. Es decir, transcurrirá por el lado de Blancafort. En total, el carril tendrá una anchura de 2,6 metros, lo que permitirá el paso de dos bicicletas al mismo tiempo.
Según el proyecto, el nuevo vial quedaría definido, y separado de la calzada, por una barrera de hormigón ganando, así, en seguridad. Además, en el primer tramo –entre la rotonda de la carretera T-11 y Blancafort–, habría una zona enjardinada a lado y lado de carril, de anchura variable. En cambio, este enjardinado no estaría proyectado entre Blancafort y Les Palmeres d’Aigüesverds. Los trabajos también servirán para mejorar el drenaje en el arcén norte de la vía.
Sobre el paso de transeúntes, no habrá acera, pero el gobierno argumentó el pasado mes de febrero que el carril sería transitable tanto por bicis como peatones. No obstante, cabe recordar que la acera era un punto especialmente reclamado por parte de los vecinos de la zona, que quieren tener una opción segura para ir andando hasta Reus. «Aun así, será mejor opción el carril que la situación actual, que tienes que andar por la carretera y es todo un peligro», puntualiza el presidente de la Associació de Veïns Les Palmeres d’Aigüesverds, Marcos Massó, también al frente de la Federació d’Associacions de Veïns de Reus (FAVR).
Donde sí se proyecta acera es en el tercer tramo, es decir, en los 4,4 kilómetros entre Aigüesverds y Cambrils. Por ahora, este proyecto está todavía en fase de redacción, pero ya se conoce un primer esbozo. Aquí, el carril bici, también de doble sentido, ganaría 400 centímetros de anchura, alcanzando los tres metros. Por la parte más cercana a la calzada es donde se habilitaría un carril específico para peatones de 1,5 metros de ancho. La zona reservada a los coches sería, en total, de ocho metros: 3,5 por carril y arcenes de 0,5 metros. Para este tramo, la inversión prevista es de 3 millones y la previsión del Departament de Territori de la Generalitat es ejecutar las obras el próximo 2024.
De momento, lo que será una realidad en menos de un año es la unión con carril bici de la rotonda de la T-11 con Aigüesverds, lo que Marcos Massó aplaude. Recuerda que la situación actual es un peligro para los peatones, pero también para las bicis. Como señala, «es una vía con mucho tráfico, sin arcén, muy estrecha y con curvas». De hecho, para que el nuevo carril pueda ser una realidad, ha sido necesario realizar expropiaciones para ganar terreno.
Por ahora, las obras no interfieren en la circulación, «pero nos han comentado que habrá más afectación cuando se ejecuten en la zona más próxima a la T-11», explica Massó.
Inversión de 6 millones de euros a dos partes
La totalidad de los trabajos (desde Reus hasta Cambrils) supondrá una inversión de 6 millones de euros. Por tramos, el primero (hasta Blancafort) cuenta con 1,1 millones cofinanciados por Generalitat y Ayuntamiento de Reus. Mediante un convenio de colaboración, el Departament de Territori aporta el 59% de la inversión, mientras que el consistorio, el 41%. Una vez construido el nuevo vial, el Ayuntamiento asumirá la titularidad. En cuanto al segundo tramo (hasta Aigüesverds), el presupuesto de las obras es de 1,9 millones de euros, a cargo de la Generalitat. Finalmente, el tercer tramo (hasta Cambrils), el Departament de Territori asumirá el coste, previsto en 3 millones.