Lo anunció el concejal de Hisenda, Manel Muñoz, en el pleno de subida de impuestos, el 22 de diciembre: «Abriremos un proceso de trabajo con algunas entidades para ver cómo, entre todos, podemos contribuir a la ciudad y sentirnos, también, beneficiados por los ingresos que se obtengan de la modificación de ordenanzas fiscales».
El edil se refirió explícitamente a dos sectores, la restauración y la construcción. Y concretó que «se establecerán mesas de trabajo en las que mirar, conjuntamente, cómo revertir los ingresos de este ajuste». Los profesionales de ambos ámbitos piden medidas para compensar la presión fiscal.
Las mesas son fruto del diálogo mantenido durante el plazo de formulación de alegaciones, en el que el ejecutivo recibió 60 enmiendas y rechazó 57. La primera reunión ya tiene fecha y se celebrará el 18 de enero de 2024.
«Lo suyo hubiese sido que nos hubiesen aprobado una reducción o una bonificación. No ha sido así y hemos llegado in extremis a esto», valora el presidente de la Associació d’Empresaris d’Hostaleria a Reus (AEH Reus), Víctor Perales. «Ya que nos suben la tasa de terrazas –un 40%–, que se revierta en el sector», destaca. Y confirma que «el día 18 será la primera mesa para hablar de que los ingresos extras vuelvan de manera directa».
Preguntado sobre si esta es una buena solución a sus reclamaciones, Perales apunta que «contentos no estamos. Pero, al menos, hemos conseguido que se nos escuche y que haya una negociación para buscar un retorno». Pese a todo, «hemos perdido más que hemos ganado, porque lo que realmente queríamos era no tener que pagar esta subida», especifica. Y añade que «si son acciones directas y nos benefician, bienvenidas. Si la puerta está abierta, lo intentaremos».
Un autobús que recogiese clientela en la costa, la concentración de las fiestas en el núcleo o la creación de unos Bons Reus específicos para la restauración eran las propuestas que la AEH Reus manejaba. Ahora, «queremos que todo el mundo dé ideas», precisa Perales.
Otro sector al que Muñoz señaló directamente fue el de la construcción, que rechazaba la subida del ICIO. El concejal indicó que «hay que ver cómo amortiguar el aumento favoreciendo políticas públicas de carácter social que supongan un incremento del parque de pisos en Reus, sobre todo destinados a alquiler social o alquiler para jóvenes».
El presidente del Gremi de la Construcció del Baix Camp –la entidad presentó enmiendas–, Ton Sentís, expresa, consultado al respecto, que «pedíamos que la subida fuese gradual y sin llegar al 4%. A partir de aquí, por ejemplo, que el impuesto fuese más bajo para los jóvenes. Estamos a la expectativa, a ver qué propondrán».