La acusada de un delito de odio en Tarragona: 'Quieren que tengamos miedo. Yo ya no tengo'

Concentración en apoyo a Olga Ricomà, mañana a las 10 horas en la puerta del Palau de Justícia

10 abril 2018 12:21 | Actualizado a 10 abril 2018 12:54
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Olga Ricomà, vecina de Tarragona e hija del concejal de ERC en el Ayuntamiento, Pau Ricomà, declarará mañana miércoles en el Juzgado de Instrucción número 2 de Tarragona, por colgar en su balcón de la avenida Roma una pancarta que ponía ‘Police go home’ (policía marcharos a casa) y por compartir la foto en el Twitter. Fue la Policía Nacional quien denunció el caso y acusó a la joven de 33 años de un delito de odio.

Ricomà ha explicado al Diari que “no entendí lo que pasó el día 1 de octubre. Tenía mucha rabia y estaba muy decepcionada”. Es por eso que decidió poner una pancarta en su balcón con un mensaje que rechazaba la actuación policial de la jornada del referéndum. Luego subió una foto del mensaje en Twitter con un mensaje añadido: “Mil ulls us vigilen, no permetrem que ens feu mal”.

 

Durante las fiestas de Navidad, Ricomà recibió la citación. “El documento no decía de qué delito se me acusaba, ponía otros”, explica la joven, quien añade que “en febrero, decidí ir a los juzgados para ver mi expediente y descubrir que es lo que había hecho”. Fue allí cuando se enteró que la acusaban de un delito de odio.

“Al principio estaba un poco nerviosa y preocupada, no sabía lo que pasaría. Nunca he hecho nada malo. Cuando supe de que me acusaban, me inquieté un poco. Pero ahora veo que imputan delitos a todo el mundo por cualquier cosa”, explica Ricomà, quien añade que “tengo la consciencia tranquila y estoy serena, porque veo que estoy recibiendo mucho apoyo”.

La joven tarraconense cree que “se trata de una estrategia. Lo que quieren es que tengamos miedo, y yo ya no tengo”. Olga Ricomà es orientadora educativa en el Martí i Franquès, un instituto ubicado justamente delante de la comisaría de la Policía Nacional. “Nos hemos sentido muy acosados por los agentes con las metralletas. Los alumnos me preguntaban el porqué de todo esto. Estaba muy cansada de la situación”, explica Ricomà.

 

 

La investigada espera que “todo caiga por su propio peso y que con las pruebas verán que no hay nada de lo que acusarme. Confío plenamente en que esto acabará bien”. Ricomà tiene claro que acudirá ante el juez, pero aún no quiere desvelar si contestará todas las preguntas o, solamente, las de su abogado.

A través de las redes sociales se está difundiendo un mensaje de apoyo a la joven tarraconense y se ha convocado una concentración para acompañarla hasta la puerta del Palau de Justícia de Tarragona, mañana a las 10 h. Ricomà dudó sobre si hacer publicó su caso, pero finalmente y tras el visto bueno de su abogado, se decantó por explicar su situación.

 

 

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