Niños superdotados paraíso o infierno

El libro 'Soc un camaleó!', de Mònica Casellas y Milagros Valera, acerca la realidad de estos menores con grandes capacidades intelectuales

19 noviembre 2018 12:59 | Actualizado a 22 noviembre 2018 10:33
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«Hola, me llamo Pol, tengo 10 años y estudio quinto de primaria. Cuando acabé tercero, mis padres me explicaron que soy un niño con altas capacidades intelectuales. Bien, exactamente me dijeron que soy superdotado». Con estas palabras empieza el libro Soc un camaleó! Les altes capacitats intel·lectuals.

Ser superdotado, que a priori se considera un hecho positivo, tiene también su vertiente negativa y sus problemas, que pueden llegar a convertir el día a día del niño o la niña en un calvario y por extensión el de los familiares y educadores. Porque ¿qué ocurre cuando un niño o niña es superdotado? ¿Cómo se detecta?

Las respuestas a estas preguntas no son sencillas. Las logopedas y pedagogas terapéuticas especialistas en altas capacidades Mònica Casellas y Milagros Valera han querido acercar esta realidad a las familias con Soc un camaleó!, un libro ilustrado por Montserrat Vidal.

Estas profesionales explican que no existe un patrón exacto de comportamiento que permita saber con facilidad cuándo un menor tiene altas capacidades. Milagros Valera revela que «normalmente son las propias familias las que más detectan estos casos.

Sin embargo, otras veces es la escuela la que ve algún problema y lo relaciona con déficit de atención u otros motivos y cuando hacemos la evaluación intelectual y emocional vemos que estamos ante un caso de altas capacidades». En este sentido, Mònica Casellas, que además de dedicarse profesionalmente es madre de un niño con altas capacidades, comenta cómo  estos niños «tienen una memoria extraordinaria, hipersensibilidad, sobre todo en temas sociales, sensibilidad física extrema y preguntas impropias para niños de su edad», entre otras cosas. 

A pesar de que altas capacidades tienden a relacionarse con el nivel intelectual, los expertos inciden en que también se ven implicadas las emociones. Así, Milagros Valera subraya que «la persona es un todo y hay que mirarlo así».

Por ello, añade, que entre las pruebas que se realizan «están las de aptitudes cognitivas, de inteligencia general, de creatividad, de perfil de personalidad y de adaptación» porque como explica esta pedagoga, «sobre todo cuando ya tienen 9 o 10 años, también miramos la adaptación escolar y social». Mònica corrobora que «de hecho, lo que más les afecta acostumbra a ser la parte social, aunque, por supuesto, no se puede generalizar porque hay muchas tipologías».

Esta especialista, que también es profesora de la Universitat Rovira i Virgili (URV), especifica que «no es lo mismo un talento matemático que solo destaca en matemáticas y en el resto puede ser un desastre, incluso suspender, o tener un talento que es superdotado, es decir, en todo. Por ello se necesitan intervenciones diferenciadas».

Se da la circunstancia de que altas capacidades en ocasiones no es sinónimo de diez en el colegio y, de hecho, son niños con necesidades específicas que no siempre encuentran la respuesta adecuada desde el sistema educativo actual. Si esto ocurre, estos alumnos pueden desmotivarse, aburrirse y cansarse de su vida escolar.

No obstante, dentro de la escuela inclusiva, Milagros y Mònica comentan que «los colegios que trabajan con metodologías diferentes y que últimamente se están  poniendo mucho al día, dan muchas respuestas a todos, pero específicamente a niños de altas capacidades». Una de las soluciones que se puede proponer es la aceleración o, lo que es lo mismo, saltar de curso.

Milagros explica que «en general, la aceleración funciona bien. Dependiendo del caso se aconseja una aceleración parcial, es decir, empezar el primer trimestre un par de asignaturas, mirar cómo va y a partir del segundo trimestre hacer el salto, si todo va bien». Otra posibilidad es la ampliación curricular, como comenta Mònica.

«Se trata de mantener al alumno en el mismo nivel pero con contenido de nivel superior. Es el elemento para enganchar a estos estudiantes. Si no, podemos tener un camaleón aburrido en clase con un alto potencial». Un camaleón que se adapta, por supuesto, de ahí el nombre del cuento, que se presentará el próximo 29 de noviembre en la Llibreria Adserà de Tarragona.

Para las familias con niños y niñas con este potencial, estas especialistas aconsejan acudir a un profesional ya sea psicólogo, psicopedagogo o pedagogo, siempre especializado en altas capacidades Ellas, por su parte, presentan el próximo mes de diciembre en Tarragona y las Terres de l’Ebre Athena, Associació per les Altes Capacitats.

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