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Alrededor de unas cien personas se concentraron ayer por la tarde en la Plaça Corsini de Tarragona para reclamar el incremento de las pensiones y su revalorización vinculada a la subida del IPC.
Fue una manifestación convocada por la Marea de Pensionistas de Tarragona en sintonía con las diferentes ramificaciones del movimiento en toda España, que hicieron en el día de ayer una jornada reivindicativa antes de tomarse un «descanso» por las fiestas de Navidad. En la ciudad tarraconense se concentran cada lunes por la mañana y volverán a la plaza del Mercado el próximo 14 de enero.
La manifestación se inició pocos minutos después de las seis de la tarde, y a medida que fue avanzando congregó a más personas. La Marea Pensionista contó con el apoyo de una quincena de miembros de la Plataforma de Afectados por la Hipoteca. Una de las cabezas visibles del colectivo en la ciudad, Pilar Sebastián destacó que «es una lucha de todos» y no únicamente de los pensionistas. «Se pierden derechos cuando hay más consumo que nunca pero también cuando la riqueza se concentra en menos manos», señaló la activista.
El análisis en profundidad de las demandas lo realizó Ramon Franquesa, portavoz de la Coordinadora Marea de Pensionistas de Catalunya y profesor de economía en la Universitat de Barcelona. Franquesa hizo una disquisición de las razones que han llevado a los pensionistas a la pérdida de poder adquisitivo.
Citó «los recortes iniciados en 2008» y la «contrareforma laboral que precarizó el trabajo, sobretodo el de los jóvenes». A su parecer ello hace que el sistema de pensiones «no ingrese suficiente» ya que «las empresas están exentas de pagar la cotización de los trabajadores». A largo plazo, según el economista, sucederá que estos trabajadores que ahora son jóvenes «no tengan cotizado suficiente para tener una pensión digna». Aún así desde la Marea Pensionista creen que «sí hay dinero» para sustentar el sistema, siempre y cuando «no lo mangoneen políticos corruptos».
Sobre la situación política Franquesa indicó que «hemos visto como caía un gobierno que se negaba a recuperar las pensiones», en referencia al ejecutivo de Rajoy, y en buena parte lo achacó a la lucha de su colectivo y al de «otros movimientos sociales». Con todo, apeló a la movilización pacífica pero constante: «Si nos ponemos en pie, somos invencibles; si mañana somos millones en la calle vamos a recuperar el IPC y el sistema que teníamos antes», a la vez que saludó a los Chalecos Amarillos franceses y a otras agrupaciones de pensionistas de países como Rusia o Brasil.
En más de 300 ciudades
El movimiento se hizo visible ayer en más de 300 ciudades de todo el Estado. Una de ellas fue Reus, con una concentración en la Plaça Prim por la tarde. Pero la principal de la jornada fue por la mañana en Barcelona. Cientos de personas se reunieron en el centro de la capital catalana, entre plaza Urquinaona y la delegación del Gobierno en Cataluña, con el lema «gobierne quien gobierne, las pensiones se defienden».
