La principal promesa electoral del alcalde Rubén Viñuales (PSC) está a punto de empezar a caminar. Según confirma al Diari el concejal de Via Pública, Guillermo García (PSC), el nuevo gobierno municipal socialista tiene previsto iniciar el próximo mes de septiembre la prueba piloto del proyecto de limpieza y mantenimiento intensivo Pam a Pam por el barrio de Parc Riuclar y, a partir de allí, extenderse posteriormente en una primera fase por el entorno de Ponent por núcleos como La Floresta, Buenos Aires y Bonavista.
A día de hoy, los técnicos de varios departamentos están ultimando el proyecto de limpieza y mantenimiento acelerado, que comportará que, durante seis semanas, tres días a la semana los servicios municipales se centren en poner al día una zona o barrio de la ciudad. Durante este tiempo, los operarios municipales se ocuparán de los trabajos de limpieza, pintura, jardinería, el estado de las aceras y del asfaltado –cubriendo los posibles hoyos– o los posibles déficits en el alumbrado público que encuentren en cada zona o barrio en el que estén. Será un lifting en toda regla.
«Los trabajadores de la casa están asumiendo la creación de este nuevo proyecto. El objetivo es mejorar la situación actual y apostar por la conservación y el mantenimiento constante, ya que nos encontramos la vía pública en un estado mejorable. Por esto, pondremos remedio con un proyecto que para nosotros es imprescindible para mejorar el bienestar de los tarraconenses», afirma el edil socialista.
Hace semanas, durante la campaña electoral, el entonces alcaldable –Rubén Viñuales– detalló que «si el Ayuntamiento no cumple con sus deberes en la vía pública, no podremos exigir a la ciudadanía que lo mantenga en un estado óptimo para que evite el incivismo que tanto daño hace en nuestras calles. Por eso, impulsaremos este proyecto de limpieza a fondo, siempre de la mano de las asociaciones de vecinos y de la participación ciudadana».
Test para ver posibles déficits
Tras casi dos meses en la Plaça de la Font, ahora la idea inicial del ejecutivo municipal es la de empezar con una prueba piloto en Parc Riuclar y, seguramente, también en otra zona cercana pero con un mayor tamaño. «Queremos ver los problemas con los que nos encontramos y afinar el protocolo de trabajo al máximo, ya que las acciones específicas se harán de forma paralela a los servicios ordinarios de todas las zonas de la ciudad. Debemos analizar cuando debe entrar cada servicio», recalca García.
En esta prueba piloto participará la Guàrdia Urbana y los departamentos de limpieza, basura, jardinería, alumbrado público, la Brigada y el Servei Municipal d’Ocupació (SMO), ya que «necesitaremos bastantes manos y aprovecharemos algún plan de ocupación», detalla el edil.
En principio, el objetivo es que esta actuación se haga, más o menos, una vez al año en cada zona, pero esto se confirmará cuando se empiece a actuar tras la reorganización de todos los servicios y se detalle la viabilidad logística para ello. «Tenemos claro que empezaremos por Ponent, y que hay otras zonas en las que está más o menos claras cómo actuaremos, pero la zona centro es la que aún no hemos definido», reconoce Guillermo García.
Desde la Asociación de Vecinos de Parc Riuclar, su presidenta –Josefa Rodríguez– afirma «estar contenta» por el hecho de que se empiece por su barrio. «Creo que la iniciativa puede ser positiva. La veo bien, si funciona, será genial», indica. Asimismo, la representante vecinal considera que «hay que hacer limpieza en todos los barrios, ya que ahora están dejados. Y tan importante será hacerlo ahora como mantenerlo en el futuro. Espero que no lo hagan solo para empezar y luego se olviden», añade.
«Nuevas estrategias»
Paralelamente, y ya pensando en los presupuestos municipales del 2024, García avanza que en las cuentas del próximo año «ya se notará una especial atención en la apuesta por la vía pública». Sobre ello, el edil resalta que una de las prioridades será ampliar la actual plantilla de la Brigada d’Intervenció Ràpida (BIR), que en estos momentos está formada por ocho operarios. «Debemos estudiar cuánto puede incrementarse según el contrato que está en vigor, pero la voluntad es ampliar el servicio», afirma Guillermo García, quien considera que «es cierto que la BIR supuso un cambio de paradigma. En su momento fue una buena solución, pero ahora es necesario diseñar nuevas estrategias y actualizar los proyectos», asegura el concejal socialista.
Finalmente, García también tiene otra prioridad sobre la mesa para gestionar a lo largo de este mandato: la EPP. «Actualmente no damos las respuestas con la celeridad que nos gustaría. Debemos mejorarlo», asegura para definir la hoja de ruta hasta 2027.