Tras una larga tramitación llegó el día. Hoy empiezan las obras del nuevo tanatorio-crematorio del cementerio. Mémora y la Fundació Sant Pau i Santa Tecla serán las encargadas de gestionar y explotar esta instalación funeraria, ubicada entre la avenida Rovira y Virgili y el barrio de Sant Pere i Sant Pau, –dentro del cementerio–. Con la puesta en marcha de este equipamiento, Tarragona contará con dos tanatorios a partir del año que viene. La competencia está servida y el monopolio llega a su fin.
La previsión es que las obras estén listas a finales de septiembre de 2025, aproximadamente un año y medio después de iniciar su construcción. Con una superficie construida de casi 3.000 metros cuadrados, el nuevo tanatorio quedará integrado en el entorno y en el paisaje, gracias a que se utilizarán materiales de construcción de la zona. El proyecto cuenta con una inversión total de más de seis millones de euros.
El edificio, por el que se accederá a través del Camí del Llorito –justo delante del aparcamiento–, se distribuirá en dos alturas y contará con una cubierta ajardinada. En la planta baja se ubicará una zona de trabajo, el oratorio, la sala de despedidas y el horno crematorio.
El oratorio, por ejemplo, será una sala de dimensiones medianas y de más altura que el resto del edificio, iluminado por un gran ventanal con una luz tamizada.
La primera planta, por su lado, acogerá el vestíbulo de acceso, las cinco salas de velatorio y la cafetería. Los velatorios estarán ubicados en la zona interior del edificio y, por su iluminación y ventilación natural, tendrán unos patios interiores.
El edificio contará una planta soterrada, donde se ubicará el aparcamiento del tanatorio. Las zonas exteriores también tendrán un papel clave en la construcción del equipamiento, ya que funcionarán como punto de encuentro para los familiares.
Según han explicado en alguna ocasión desde las empresas encargadas de gestionar el tanatorio, el edificio se construirá siguiendo los criterios de arquitectura sostenible . «La cubierta ajardinada permitirá optimizar la eficiencia energética de la instalación. Además, en la construcción de este nuevo emplazamiento, se han buscado soluciones y materiales que requieran de poco mantenimiento y que tengan un buen envejecimiento», explican las empresas.
El nuevo tanatorio del cementerio ofrecerá programas de carácter más social, como por ejemplo, un programa de acompañamiento al duelo o el de Ciutats que cuiden, que pretende sensibilizar la sociedad sobre la necesidad de garantizar una muerte digna. Con todo ello, está previsto que Mémora y Santa Tecla contraten un total de diez trabajadores que formarán la plantilla del nuevo tanatorio.
A partir de esta mañana, los operarios empezarán a entrar maquinaria para que, en primer lugar, se lleve a cabo el acta de replanteo. Se trata de un documento mediante el cual se puede dar comienzo a una obra y que, sin este acta firmada, la obra no tendría carácter legal. A partir de la próxima semana, los operarios ya estarán trabajando a pleno rendimiento. Los impulsores calculan que las obras se alarguen por un período de 18 meses y que, en otoño del año que viene, el equipamiento ya pueda entrar en funcionamiento.
Él último trámite
Paralelamente a la tramitación de la licencia de obras, el Ayuntamiento de Tarragona aprobaba el pasado 19 de abril el plan especial de acceso al tanatorio por el Camí del Llorito. Este trámite era clave para empezar con la construcción del equipamiento. Con el plan especial listo, el nuevo tanatorio contará con una entrada independiente a la del cementerio.
Este documento ha sido el último en aprobarse y ha generado un poco de polémica entre administración y empresas. Y es que, al tratarse de una actuación en un suelo no urbanizable, se ha tenido que someter a una evaluación ambiental para valorar el impacto que pueda tener.
Una tramitación lenta
La tramitación de los permisos y licencias para el nuevo tanatorio ha sido lenta y con obstáculos por el camino. La polémica también ha estado presente. La historia empezó en 2022, cuando Mémora y Santa Tecla iniciaron los trámites y pidieron las autorizaciones al Ayuntamiento. Sin embargo, el proyecto no se ha desencallado hasta hace unos pocos meses. En alguna ocasión, fuentes de Mémora y Santa Tecla han apuntado que el antiguo gobierno municipal de ERC puso palos a las ruedas al proyecto. Sea como sea, lo cierto es que el nuevo tanatorio-crematorio del cementerio ya empieza a andar y será una realidad en 2025.