La boda, el embarazo, la felicidad... y de nuevo a buscar pareja

Los seres humanos hemos nacido para vivir en pareja, somos una especie social que necesitamos de los demás para poder vivir cómodamente y satisfacer nuestras necesidades. En este orden social que hemos aceptado, vivir en pareja es el modo más cómodo de alcanzar la felicidad.

Sin embargo, la felicidad para todo el mundo no radica en encontrar pareja, sino en ser felices por ellos mismos, sin necesidad de tener una persona al lado que nos complete. Por tanto, debemos alejarnos de esa idea de encontrar a esa media naranja que nos haga completamente felices y saber que cada uno de nosotros somos una naranja completa.

Así, la pareja será algo que nos complemente y no que nos complete, saber ser felices sin necesidad de descargar todo el peso de nuestra felicidad en otra persona, pues esto supone que no podemos ser felices por nosotros mismos.

Toda esta introducción nos sirve para introducir las diferentes formas de amor que existen en la actualidad, con el fin de no querer discriminar a ninguna, de moda que tengan cabida tanto el amor heterosexual entre parejas como todas las formas de poliamor posible.

Y esto, que es importante, sirve también para que esta ola de posmodernidad no haga creer la sensación de que las formas de amor tradicional son menos válidas. Todavía hoy en día muchas mujeres siguen siendo cuestionadas por la firme decisión de no tener hijos, no ser madres. Mucha gente, y muchas mujeres, creen que la maternidad es la experiencia más intensa que una mujer puede vivir en su vida, y que sin llevarla a cabo, no pueden sentirse totalmente plenas.

La lucha por derribar estas ideas preconcebidas y estos prejuicios no debe, sin embargo, desprestigiar a las formas de amor tradicionales, y es que siguen siendo muchas personas las que creen que su vida amorosa debe reproducir los ideales tradicionales: el noviazgo, la boda, los hijos... y si esta experiencia amorosa finaliza, volver a comenzar de nuevo.

La boda para mostrar al mundo el amor en pareja

En este conjunto de etapas que propone el amor tradicional, tras el amor llega la boda. Aunque las bodas hoy en día no son como las bodas hace años, que suponían un verdadero cambio: independencia familiar, el momento de convivir juntos e iniciar una nueva vida, siguen teniendo ese componente idealizado de que es una nueva etapa en pareja: aunque la relación ya esté estabilizada y se conviva desde hace tiempo, incluso teniendo hijos en común.

El matrimonio, y la boda, que es el acto para formar el matrimonio, resulta de interés para mucha gente, hasta el punto de que los protagonistas piensan durante meses y años en su gran día. Si eres amante de las bodas, incluso puedes llegar a soñar con una boda. El significado de soñar con casarse es diferente atendiendo al tipo de sueño, de modo que existen varias formas de interpretar un sueño en el que asistes a una boda ajena, una boda propia o la cercanía de estas celebraciones.

En cualquier caso, antes de llegar a la boda está la fase previa, que es el noviazgo. Si hablamos de una forma de amor tradicional, la boda y el matrimonio son estados muy avanzados en la relación, que previamente a este momento ha de ir consolidándose a través del noviazgo.

El noviazgo es la fase clave en la que ambos miembros de la pareja van reforzando su relación, conociéndose, respetándose y soportándose. No se trata de medir el noviazgo en tiempo, ni siquiera en intensidad, sino en reforzarlo para que, más tarde, cuando lleguen la boda y el matrimonio, que suponen relaciones con mayor grado de compromiso, el resultado sea el más duradero posible.

Y claro, antes del noviazgo llega el flirteo, la fase de enamoramiento. Si queremos interesarnos por esa otra persona que nos llama la atención, que nos gusta, debemos intentar agradarle, conocerla, enamorarla en definitiva.

En esta tarea, mucha gente sigue creyendo en la astrología, en que las personas podemos enamorarnos atendiendo a nuestro signo del Zodiaco. Así, en la web Como Enamorar a un Hombre nos muestran todo sobre el hombre acuario, de modo que nos pueden dar algunas claves para triunfar en esta conquista amorosa.

El embarazo, ¿son los bebés la felicidad de la pareja?

En esta forma de amor tradicional, tras el noviazgo, la convivencia y el matrimonio, el siguiente paso esperado es el de la llegada de los hijos. Insistimos en que todas las formas de amor son posibles, y todos los esquemas, pero el hecho de que todo esto sea posible no puede servir para desvirtuar las formas de pareja tradicionales, sobre todo si lo que existe es amor verdadero.

La llegada de los bebés a una familia supone, si cabe, todavía más compromiso. Un bebé es sinónimo de renuncias materiales, dedicar tiempo a personas que están bajo nuestra tutela y un fuerte sacrificio económico.

Si no se está dispuesto a esta realidad, un embarazo nunca es buena idea. Cuando una mujer está en esta fase, el compromiso, el entendimiento mutuo y el apoyo son más que nunca necesarios, especialmente si se dan problemas en el embarazo, como por ejemplo en casos de embarazo ectópico o embarazo tubárico.

Una mala gestión de la pareja durante el embarazo puede dar lugar a crisis de pareja importantes. Con la llegada de los bebés es igualmente importante reforzar la relación siempre que sea posible, pues en caso de un divorcio, los que lo acaban pagando suelen ser los pequeños, que ven cómo su realidad familiar se desmorona.

En cualquier caso, el divorcio o la separación ha de considerarse como una posible etapa más de la vida, no solo como un fracaso. Si una relación no funciona, las personas no se pueden atar a ella de manera definitiva.

Así, cuando una pareja se separa, la clave para encontrar un nuevo amor está en iniciar de nuevo el ciclo que comentamos, o bien probar nuevas experiencias. En la actualidad, la tecnología ayuda a conocer gente nueva que se aleje del círculo más cercano.

Existen aplicaciones para ligar, una de las más conocidas para ligar por internet es Tinder. En la web Online Seducer nos enseñan algunos trucos para aprender como funciona tinder, de modo que, si vives una etapa de soltería y quieres conocer nuevas experiencias, internet puede ser un gran aliado.