Una tablet para el Alzheimer en El Catllar

Marina Plana (Reus, 21 años) está decidida a contribuir a contener el avance de los síntomas del Alzheimer. Una tablet con un software integrado es la herramienta que ha elegido para esta causa. Remind (con sede en El Catllar, donde reside Marina) es el nombre de su proyecto, y ya hay quien empieza a creer en él.

El próximo otoño, Marina Plana viajará hasta Silicon Valley, de la mano del programa Explorer de Banco Santander, para pasar una semana entre otros emprendedores tecnológicos, participando en un proceso que tiene su fase final en Madrid, donde cinco de los 53 participantes seleccionados optarán a un premio con el que impulsar la financiación inicial de sus proyectos.

Marina espera llegar hasta ahí. Aunque no es su única opción. Tras pasar por el programa de acompañamiento al emprendimiento de Tarragona Impulsa y de la Diputació de Tarragona, cuenta con tener un prototipo viable de su dispositivo entre enero y febrero de 2019. Para ello, necesitará haber invertido unos 35.000 euros, que espera conseguir en parte mediante una campaña de crowdfunding.

Será el momento de lanzarse a comercializar su propuesta, que hasta ahora se encuentra en fase de desarrollo, con resultados de pruebas piloto alentadores. Cuenta que entre los pasados 1 de mayo y 1 de junio, dos personas aquejadas de Alzheimer (Carmen y Pedro) llevaron a cabo una prueba piloto con el material que está desarrollando Remind.

Tras pasar ambos un primer test el 1 de mayo, Carmen siguió la rutina propuesta por Remind, de media hora al día con ejercicios cognitivos, físicos y cerebrales, además de una dieta saludable. Pedro siguió con su día a día habitual. Cuenta Marina Plana que, pasado ese mes, ambos volvieron a realizar el test. Los resultados de Carmen fueron mejores.

La propuesta de esta joven emprendedora, que compagina sus estudios de Administración y Dirección de Empresas en la Universitat Rovira i Virgili con su proyecto, es contar con dispositivos exclusivos, con el software integrado y personalizado en función de las necesidades de cada usuario), que comercializará entre los 350 euros (en su versión con Wifi) y los 400 euros (4G), con una actualización anual de 5 euros.

Su mercado son familias y centros residenciales privados. Quiere empezar por el Camp de Tarragona para, a partir de 2021, dar el salto a Barcelona y Madrid. En este tiempo espera contactar con asociaciones de familiares y fundaciones dedicadas a investigar el Alzheimer, con las que espera poder colaborar.

«Mi abuela tenía Alzheimer: Murió cuando yo tenía diez años; Siempre he querido ayudar»

¿Por qué este proyecto? Como tantas veces, por una vivencia personal. «Mi abuela Carmen -explica Marina Plana- murió cuando yo tenía unos diez años, y tenía Alzheimer. En la última fase, yo lo pasé muy mal, porque no podía hacer nada para ayudar». En especial, le dolía la incapacidad de reconocer a sus familiares más próximos. «La idea de ayudar siempre la tuve en la cabeza».

Una charla en su universidad por parte de Tarragona Impulsa, alentándoles a participar en el programa Explorer, conectó sus inquietudes. Marina no aspira a nada más (ni nada menos) que a retardar en todo lo que sea posible el avance de los síntomas de esta enfermedad. Con algo más: una funcionalidad de la aplicación que permite ejercitar el reconocimiento visual y auditivo de los familiares del afectado de Alzheimer.