'Loving Pablo': retrato del hombre que cambió la historia del crimen

La figura del capo colombiano de la droga Pablo Escobar tiene recientes visiones entre el gran público, gracias especialmente a la aparición del personaje en la serie Narcos, de Netflix.

Sin embargo, el trío formado por el matrimonio actoral Javier Bardem-Penélope Cruz y el cineasta Fernando León de Aranoa han querido ofrecer un retrato que fuera más allá de esa imagen mientras tratan de ahondar en el lado más oscuro del ser humano. «En las distancias cortas es donde se reconoce al monstruo», explica Bardem, para quien los papeles de psicópata le han supuesto un Oscar (en No es país para viejos) y gran prestigio con su interpretación del villano Raoul Silva en Skyfall,  la vigésimotercera película de James Bond estrenada en 2012.

El objetivo, tanto de los actores como del cineasta como del director, no es otro que mostrar una parte no vista  en otras propuestas (ya sea en televisión o cine), que es la intimidad del personaje. Porque la película relata el ascenso y caída de Escobar poniendo el foco  en su relación amorosa con la periodista Virginia Vallejo (Penélope Cruz).

No esperen encontrar aquí al típico malo-malísimo de cualquier película al uso de Hollywood. León de Aranoa  busca adentrarnos en la figura de un capo que ordenó matar, creó un imperio del terror y que, en esas distancias cortas, es donde nos da una mayor sensación de incomodidad.

Explorar nuevos terrenos
Fernando León de Aranoa aprovecha Loving Pablo para explorar nuevos terrenos tras anteriores éxitos como Familia (1996), Barrio (1998), Princesas (2005) y, especialmente, Los lunes al sol (2002). En su mayoría dramas sociales en forma de denuncia reivindicativa.
Ahora el drama ya no es social, es humano y en él veremos al  narcotraficante colombiano, según se refleja en el libro Amando a Pablo, odiando a Escobar escrito por la propia Virginia Vallejo y donde cuenta la relación amorosa que mantuvo con el narcotraficante en la década de los 80.

Para meterse en su papel de Vallejo, Penélope Cruz no sólo se leyó el libro, sino que también  leyó sus memorias y estudió horas y horas de entrevistas suyas, tanto como periodista y como entrevistada. De ahí que ofrezca un personaje  repleto de capas, matices y colores. No en vano fue nominada este año a los Goya por este trabajo, al igual que Javier Bardem por su interpretación de Pablo Escobar. Sin embargo, el filme decepciona en esa ambición por descubrir nuevos giros en el personaje al tiempo que es por momentos bastante superficial. Por ello, no acabamos de saber si amamos u odios a Pablo. 

‘Winchester: la casa que construyeron los espíritus’ 

Basada en la historia de la mansión victoriana Winchester, situada en California. Fue construida por la heredera del creador de los rifles Winchester, Sarah Winchester (Helen Mirren), y su convicción de que en ella habitaban multitud de fantasmas.

Tras la desaparición de su padre, un científico, tres seres peculiares envían a la joven Meg, a su hermano Charles y a su amigo Calvin al espacio, para intentar encontrarlo. Adaptación de la novela de Madeleine L’Engle.

Martinón es un trampero solitario, el último habitante de un remoto pueblo en las montañas. Su único contacto con otros seres humanos se produce en primavera, cuando desciende al valle para comerciar con las pieles de los animales que atrapa. Sin embargo, con la llegada de una mujer a su vida, empezará a experimentar nuevos sentimientos. La película está protagonizada por Mario Casas e Irene Escolar.