Como toda huelga general, el Gobierno debe fijar unos servicios mínimos que garanticen a los ciudadanos los desplazamientos y servicios más urgentes y a su vez hacerlo compatible con el derecho a ejercer la huelga.
Y así lo ha fijado el Ministerio de Fomento en tres órdenes ministeriales que afectan al transporte ferroviario, aéreo y por carretera, unas órdenes contra las que CC OO interpuso un recurso en la Audiencia Nacional al considerarlos «abusivos».
Renfe anunció el lunes la suspensión de 105 trenes de AVE y Larga Distancia de su oferta habitual: del total de 376 se realizarán 271, de forma que se garantiza el 72% de las circulaciones de este tipo de trenes.
En el caso de los servicios de Cercanías, los servicios mínimos garantizan la circulación del 50% de los trenes habituales, porcentaje que se eleva al 75% en ‘hora punta’.
Respecto al transporte aéreo, se mantendrán todas las conexiones con las islas y Ceuta y Melilla, mientras que las conexiones dentro de la Península se limitarán a entre un 36% y un 56%, dependiendo de si el medio alternativo supone menos o más de 5 horas.
A su vez, los enlaces con el extranjero llegarán a un 56%. Por su parte, se mantendrá el 50% de todo el transporte por carretera. Se trata, por tanto, de unos servicios mínimos muy superiores a los de la huelga general de 2012.