El 17 de mayo se celebró el Día Mundial del Reciclaje que debe servir para concienciar a la población sobre el aprovechamiento de residuos.
Esa práctica, esencial para el aprovechamiento de materiales, el ahorro, evitar el despilfarro y la extracción de materia prima, ya era la lógica siglos atrás. Lo de aprovechar la otra cara del folio tiene siglos.
Con motivo de la fecha del reciclaje, el Arxiu Comarcal del Baix Penedès ha recordado que ya hace siglos los escribientes aprovechaban el soporte en el que escribían ante lo que podía ser una escasez de recursos o sencillamente para economizar.
El Arxiu del Baix Penedès lo explica con una muestra que ha podido conservarse del fondo documental del Ayuntamiento de Bonastre.
Es un capbreu de Santa Magadalena de Bonastre, bisbado de Barcelona, del año 1694.
Es un documento notarial en el que Francesc Bernat de Pons, abad de Sant Cugat del Vallès, «senyor de la vila i la baronia del Vendrell», recaudaba los censos de las propiedades rústicas y urbanas de Bonastre.
En el proceso de restauración del libro los expertos encontraron una situación singular. Se extrajo la cubierta porque antes se había aprovechado para un pergamino escrito en 1590.
La archivera del Baix Penedès, Nati Castejón, destaca la singularidad, pero explica que no es una rareza. «El soporte de escritura era caro y se aprovechaba».
Así el documento, en su encuadernación muestra el pergamino de 1590 y en la otra cara el capbreu de 1694. «Se aprovechó porque se consideraría que el pergamino ya había prescrito y podría aprovecharse».