La FP Dual, una herramienta muy útil para combatir el desempleo juvenil

Entre muchas de las fatales consecuencias que nos ha traído la pandemia, cabe destacar la situación que sufren los jóvenes de nuestro país. Según datos recientes del Servicio Público de Empleo Estatal (SEPE), el 40,5% de los jóvenes no tiene empleo. Estamos hablando del peor porcentaje registrado desde 2017 y el más elevado de la Unión Europea. Con este panorama encima de la mesa, es evidente la importancia que tiene hoy en día la Formación Profesional (FP) Dual, una modalidad formativa pionera que combina formación en el centro educativo y en la empresa, facilitando la inserción de los aprendices en un entorno laboral real.

Narcís Almena, director del Institut Comte de Rius de Tarragona, nos ayuda a entender el concepto de FP Dual. «Los alumnos hacen un primer curso en el instituto, con más horas de las habituales. En segundo, el estudiante se incorpora en una empresa para completar el grado», explica Almena. Por norma general, en el segundo año, el alumno va uno o dos días por semana al instituto y los restantes a la empresa en cuestión. 
Por su parte, el director del Institut Pere Martell de Tarragona, Àngel Miguel, define con la palabra «compromiso» este tipo de formación. «El de las empresas, que se comprometen a encarnar este rol de formador. También el del alumno que debe respetar estrictamente las reglas del juego y, por último, el del centro, encargado de la organización», asegura Miguel, quien añade que «si este compromiso a tres bandas funciona, el éxito está garantizado». 

La FP Dual tiene un sinfín de bondades y virtudes. Para empezar, los alumnos toman contacto con la empresa «y son capaces de conocer la realidad de la compañía y de lo que estudian insitu, en directo», apunta Almena, quien añade que «el resultado es una formación de más calidad». Por otro lado, para la empresa es el sistema de reclutamiento perfecto. Es muy positivo tener un alumno formándose y que después la compañía pueda acabar seleccionando. En definitiva, la FP Dual se concibe como una herramienta muy útil para combatir el desempleo juvenil. 

Además, cuenta con una amplia oferta de títulos asociados a profesiones en crecimiento y altamente demandadas, prácticas remuneradas en empresas y una tasa de inserción laboral que ronda el 70%. El amplio arraigo de la FP Dual en países centroeuropeos, como Alemania y Austria, con tasas de desempleo juvenil muy bajas, es una prueba más de la eficacia del modelo.

Una de las ventajas del  territorio es el arraigo que la FP Dual tiene con el sector de la química

«La inserción laboral está asegurada con este sistema», apunta Almena, quien añade que «se ha demostrado que el éxito es rotundo y total. Las empresas conocen a sus profesionales y los alumnos tienen la oportunidad de crecer».

Actualmente, y para hacerse una idea, en el Institut Comte de Rius hay seis grupos completos que llevan a cabo la FP Dual, lo que significa un total de 180 alumnos de los 1.280 que hay. 

Por el momento, son las grandes empresas quienes se están implicando con más fuerza a esta formación. Un estudio realizado por la alianza para la FP Dual reveló que el 87% de las compañías consultadas –unas cien– veían esta modalidad una vía para formar una cantera de personal con una calificación específica y con encaje en la cultura de la empresa.

El impulso necesario

A pesar de sus bondades, la FP Dual necesita de un impulso. Todo parece indicar que el próximo curso será clave en este ámbito. A partir de ahora, la organización del currículum de todos los alumnos de FP contemplará la posibilidad de formarse con la modalidad Dual. Lo que no significa que todos lo hagan, sino que todos puedan tener la opción, si así lo quieren.  

Quedan todavía muchos retos por delante: actualizar los títulos, dar a conocer la FP Dual a alumnos y familias, comprometer instituto y compañías y dar un mayor impulso entre las pequeñas y medianas empresas. 

La llegada de la pandemia

La Covid-19 lo ha dificultado todo. Muchas empresas se han visto obligadas a poner a sus trabajadores en ERTE, condición que no permite contratar a nadie. Además, la actividad en algunos sectores ha disminuido considerablemente. No obstante, los responsables de la FP Dual en los institutos tarraconenses se muestran esperanzados y auguran un buen futuro para esta modalidad. Una de las ventajas de nuestro territorio, es el importante arraigo que la FP Dual tiene con el sector de la química, que trabaja duro para acercar el ámbito empresarial al educativo, en pro de la mejora de la empleabilidad.

Los datos

Un 74,465 de los titulados en la provincia consiguen trabajo

Entre seis y nueve meses después de aprobar un ciclo formativo en la modalidad de FP Dual, un 74,46% de los titulados en la provincia de Tarragona consigue trabajo. A estos habría que añadir un 13,67% que estudia y trabaja. Estos datos fueron explicados hace aproximadamente un año en la jornada ‘Invertim en formació professional, invertim en futur’, que se desarrolló dentro del ciclo Els Debats del Diari, organizado por ‘Diari de Tarragona’.