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El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, descartó este martes que el Gobierno vaya a incluir la aplicación de peajes de pago por uso en la red de autovías dentro de la nueva Ley de Movilidad Sostenible. Lo hizo en sede parlamentaria, durante la sesión de control al Ejecutivo en el Senado, donde aclaró que ese texto "no dispone ni concreta la adopción de medida alguna vinculada con la entrada en vigor de peajes".
El Consejo de Ministros tiene previsto aprobar el próximo 1 de marzo el anteproyecto de esa ley, llamada en un principio a incluir la polémica medida. Sánchez apuntó que la norma servirá para que España "avance en un nuevo modelo de transportes, vinculado a la sostenibilidad, la digitalización y la cohesión social e interterritorial".
La aclaración de Sánchez llegó apenas dos días después de las elecciones autonómicas de Castilla y León, a pesar de que el Ejecutivo había incluido en el Plan de Recuperación remitido a mediados del año pasado a la Comisión Europea la posibilidad de aplicar pagos por uso en las carreteras de alta capacidad de toda España. Aunque en ningún momento ha llegado a definir ese proyecto. Por ahora, la idea queda aparcada.
El Ministerio de Transportes seguirá en "fase de análisis", según apuntan fuentes del departamento dirigido por Raquel Sánchez. Se trata habilitar una solución que plantee "un sistema que sea justo y que equilibre desigualdades". Estaba previsto aplicarla, como muy tarde, en 2024. "Corresponde ahora hacer un ejercicio de responsabilidad y plantear cuál puede ser el mejor sistema, pero teniendo en cuenta las singularidades de cada territorio", ha indicado recientemente Sánchez.
Reproches al PP
En su intervención de este martes en la Cámara Alta, Pedro Sánchez reprochó al PP los dos informes elaborados por el Ministerio de Fomento durante su mandato en los que se planteaba una recaudación de 2.700 millones de euros al año por el cobro de peajes. La Ley de Movilidad Sostenible sí incluirá un título específico sobre la planificación de infraestructuras, que recogerá el coste y beneficio de cada proyecto, considerando tanto la rentabilidad financiera como la económica y social, para aprovechar al máximo los fondos europeos.
La posibilidad de aplicar peajes en las autovías está llamada a ser "consensuada", según ha insistido Raquel Sánchez en todas sus intervenciones. Más aún después de que los transportistas comenzaran sus protestas a finales del año pasado en un momento especialmente complicado tras la aprobación de la euroviñeta que grava los vehículos contaminantes en la UE y la subida de combustibles.
