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Un total de 110 actores de los ámbitos de salud, empresa, comercio, educación, investigación, medios de comunicación, deporte, ocio, asociaciones y administraciones han firmado este lunes el Pacto por la Reforma Horaria, un acuerdo que guiará la implementación de esta medida en todos los ámbitos en 2025 y convertir el tiempo en "una medida de libertad, equidad y bienestar".
Lo ha explicado en un acto de presentación en la Generalitat el conseller de la Presidencia, Jordi Turull, ante representantes de las entidades firmantes, entre las que figuran actores como las cuatro diputaciones catalanas, Pimec, Fomento del Trabajo Nacional, CC.OO., UGT, 12 universidades, la Corporació Catalana de Mitjans Audiovisuals (CCMA), el Ayuntamiento de Barcelona y colegios profesionales de salud y otros ámbitos sociales.
Turull se ha referido a la que fue consellera de la Presidencia hasta el pasado viernes, Neus Munté, y le ha atribuido el mérito del logro de la firma de una iniciativa que empezó hace tres años, y ha asegurado que mantiene el compromiso de la exconsellera.
El presidente de la Generalitat, Carles Puigdemont, ha celebrado la participación de los presentes, y ha observado que llegar a pactos de esta envergadura y esta capacidad de transformación "no es nunca sencillo ni cosa de pocos", sino que es necesario tener la voluntad de llegar y que todas las partes pongan su esfuerzo.
También es necesaria generosidad para con los demás y coraje, tanto para explicar los resultados, como para "no desdecirse de los compromisos en las primeras dificultades", ha dicho el presidente.
Malbaratamiento
Puigdemont ha afirmado que todo pacto empieza por el reconocimiento de que hay un problema, y el actual lo hace desde la constatación del problema con la distribución del tiempo: "Malbaratamos el tiempo, en una sociedad que desperdicia los alimentos, la energía, los recursos y el agua", y que es consciente de que si sigue haciéndolo no tendrá futuro, ha dicho.
Ha observado que la nueva revolución industrial ya ha empezado, y se está abordando desde la educación --por ejemplo con investigación en inteligencia artificial-- y en las infraestructuras --con nuevas formas de diseño urbano y movilidad-- en un entorno comunicado: "¿Por qué no tenemos que hacerlo en la infraestructura mas importante, el tiempo?"
Para incorporar beneficios humanos de los cambios hay que adaptarse, y ha dicho que si la sociedad y las instituciones no lideran la forma en la que se adaptan, serán los cambios los que los adapten a ellos, con malas consecuencias, por lo que ha celebrado el esfuerzo para esta reforma que iniciaron unos pioneros y han firmado este lunes 110 actores. "VERDADERA REVOLUCIÓN"
Ha remarcado que cambiar solo dos de las 24 horas del día ya supondrá una "verdadera revolución", y que tendrá mejoras en la salud, en la corresponsabilidad en las tareas de cuidado entre géneros, y en el bienestar, con cambios en la actividad económica y académica, que impulsarán la competitividad
La mañana de este lunes, Cs, PSC, SíQueEsPot y el PP han enviado una carta al Govern en la que anuncian que no firmarán el Pacto, y Turull --que no ha hecho referencia a la carta-- ha admitido en el acto que algunos actores miran con escepticismo e incredulidad este cambio.
Ha destacado que cambios anteriores también parecían actitudes utópicas pero se han logrado, como los hábitos de reciclaje, no fumar en interiores, llevar casco en las motos y el cinturón en los coches: "La actual distribución del tiempo nos parecerá caduca y desfasada", después de 2025.
Avanzar horarios comerciales
En declaraciones a los medios, el diputado en el Parlament e impulsor de la reforma Fabian Mohedano ha explicado que el pacto abre la puerta para que en los próximos años se den negociaciones, intercambios, y diálogo entre los actores, con el objetivo de lograrlo en 2025 y con la negociación colectiva como clave.
Ha explicado que la ponencia en el Parlament que trabajaba en un proyecto de ley para la reforma horaria se paralizó, ante el hecho de que la Generalitat no tiene competencias para regular todos los ámbitos y con la voluntad de poner el pacto por delante de la ley.
Ha añadido que ya han habido los primeros cambios hacia esta reforma, como que la introducción en el debate social de que los institutos recuperen las comidas dentro de su horario y que se pare el proceso de jornadas intensivas en primaria, mientras que se habla de avanzar el cierre del comercio a las 21.30, con posibilidad de hacerlo a las 21.00 en invierno: "Habrá una reculación de como mínimo media hora en horarios comerciales", ha afirmado.
