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Los Mossos d’Esquadra instalaron controles ayer por la tarde en las principales vías de salida de Barcelona. El amplio despliegue policial, con el objetivo de localizar y detener al autor material del atropello masivo en las Ramblas, provocó importantes colapsos circulatorios en la salida de vehículos de la capital catalana, que se prolongaban al cierre de esta edición.
El Servei Català de Trànsit advirtió a la ciudadanía que evitara los desplazamientos que no fueran estrictamente necesarios.
La salida de Barcelona por la B-20, la C-58 o la C-31, al norte de la ciudad, fueron algunos de los puntos de la red viaria más complicados, así como la avenida Diagonal, por el sur. Las rondas también se colapsaron.
Según la información difundida ayer por la noche por TV3, el colapso circulatorio debido a los controles de los Mossos, que en algunas vías inhabilitaron carriles para una mejor efectividad de la actuación policial, puesto que se controlaban todos y cada uno de los vehículos, habían provocado retenciones de hasta cuatro horas.
Los controles policiales afectaron especialmente una víaprincipal de la ciudad como la Diagonal, con solo un carril avierto de salida para los vehículos.
Los Mossos d’Esquadra también realizaron controles en los peajes de la AP-7 en dirección Girona a la altura de La Roca del Vallès.
Los agentes controlaban todos y cada uno de los coches que pasaban por los peaje, lo que ha generó colas kilométricas.
