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El grupo municipal de ERC en Celrà (Girona) ha tachado este viernes de inconcebible que el equipo de gobierno del municipio, liderado por la CUP, quiera poner "un nombre franquista" a unos jardines públicos, y pide poner otro.
Los republicanos han explicado que en los años 80 el Ayuntamiento inició las negociaciones para tejer un nuevo plan urbanístico, que proyectó una zona verde en la actual finca de Can Cors, una parte de la cual se convertía en zona verde privada para la familia Cors Malagrida y la otra parte, en zona verde pública de uso ciudadano.
Más adelante, se planteó la posibilidad de revertir al uso público esa zona, lo que significaba la expropiación de los terrenos, pero no se llevó a cabo porque la operación habría perjudicado a las arcas públicas.
A mediados de los 90, se llegó a un acuerdo con la familia Cors Malagrida y el consistorio -que dirigía ERC-, por el que, a cambio de no ceder el espacio verde hasta que la propietaria muriese, ella donaba al pueblo del Celrà la Torre Desvern y las tierras necesarias para abrir una carretera.
Recientemente, con la muerte de Concepción Malagrida, este espacio verde pasa definitivamente a la titularidad pública con coste cero para el Ayuntamiento, pero el grupo municipal de la CUP ha llegado a un compromiso con la familia para poner el nombre de Malagrida a estos jardines.
"El problema recae en el origen de esta familia, ya que José Malagrida, el padre de los actuales propietarios del espacio, era un reputado militar franquista con unos lazos fraternales con el antiguo régimen y la corona", exponen los republicanos.
ERC pide que el municipio "no sirva de homenaje a un personaje franquista que siempre se vanaglorió de su estatus preferente ante el régimen y la monarquía", por lo que proponen recuperar el nombre de Cors-Guinart.
Son los apellidos de la familia que ocupaba aquellas tierras antes de que "el heredero franquista se apoderase de ellas al casarse con la heredera" de la familia de Celrà, dicen los republicanos.
