La trágica muerte de tres personas en la C-12, en el término municipal de Llardecans (Segrià, Lleida), y donde uno de los tres fallecidos era un agente de los Mossos d'Esquadra fuera de servicio, ha dado una información que estremece.
El conductor de la furgoneta de asistencia que impactó con un coche poco antes de las 20.30 horas de este domingo en la C-12, muy cerca de la provincia de Tarragona, salió por su propio pie del vehículo.
Y según han narrado testigos oculares en el momento del accidente y los Mossos d'Esquadra que llegaron minutos despúes, Eduardo V.F. estaba vivo cuando salió de la furgoneta por su propio pie.
En aquellos momentos, con cristales u otro objeto punzante (no se descarta un cúter), el hombre empezó a autolesionarse en brazos y cuello, hasta el punto que por exanguinación podría haber fallecido poco después en el hospital Arnau de Vilanova de Lleida.
Lo que parece probable es que el conductor de la furgoneta fue el que invadió el carril contrario en esta carretera y causó el choque frontal, donde falleció el conductor del otro vehículo, Vicente C.G., vecino de Alpicat de 50 años y mossos d'Esquadra, y una de las dos hermanas que viajaban en el vehículo: Maria Isabel R.H., de 64 años. La otra mujer, de 54, entró grave en el Arnau de Vilanova.