La cultura 'desaparece' de Catalunya durante 15 días

Entre las nuevas medidas decretadas por el Govern para frenar el coronavirus se  ha incluido el cierre de teatros, auditorios, salas de conciertos y también cines

30 octubre 2020 11:37 | Actualizado a 30 octubre 2020 13:13
    Imagen de un cartel en apoyo a la cultura. EFE
    Imagen de un cartel en apoyo a la cultura. EFE
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La actividad cultural queda prácticamente parada desde este viernes y al menos hasta dentro de quince días. Entre las nuevas medidas decretadas por el Govern para frenar el coronavirus se  ha incluido el cierre de teatros, auditorios, salas de conciertos y también cines, y solo podrán abrir los museos, salas de exposiciones y galerías de arte, pero con un 30% de aforo.

Las bibliotecas tendrán la actividad limitada al servicio de préstamo. Las nuevas restricciones afectan a festivales y ciclos como Sala Bcn, Temporada Alta o el Festival de Jazz de Barcelona, que acababa de arrancar. El sector cultural protestó ayer con vehemencia a través de las redes y con una concentración a las puertas de la Consellería de Cultura contra a la decisión del ejecutivo.

 

La entrada en vigor de las nuevas medidas restrictivas del Gobierno tendrá un gran impacto en el mundo cultural. Las actividades escénicas (los teatros, auditorios y salas de conciertos) quedan en suspenso por un periodo de al menos quince días. La mayoría de teatros de Barcelona y de Catalunya habían puesto en marcha la temporada recientemente y con dificultades por las restricciones de aforo que ya imperaba la incertidumbre sobre la evolución de la pandemia.

Además, una serie de festivales teatrales y musicales también se ven afectados por el cierre ordenado desde el Procicat. Entre ellos el Temporada Alta de Girona, que ha suspendido todas las funciones presenciales durante quince días, o el Festival de Jazz de Barcelona, que apenas arrancó miércoles, y ayer se despedía temporalmente con un concierto de Sílvia Pérez Cruz en la Sala Barts. El Ciudad Flamenco, el Festival de Jazz de Terrassa, el Festival Acróbatas de l'Hospitalet de Llobregat, y el ciclo Sala Bcn en el Castell de Montjuic, son otras citas que quedan temporalmente suspendidas, o ya canceladas.

Museos y galerías pueden abrir

La otra cara de la moneda son los archivos, los museos, las galerías de arte y las salas de exposiciones. Junto con las bibliotecas, estas equipaciones también están afectadas por las nuevas medidas, pero no tienen que cerrar. Los primeros se pueden mantener abiertos, ahora con una reducción del aforo hasta un máximo del 30%. Las bibliotecas, a su vez, tienen la actividad limitada al servicio de préstamo, de manera parecida a las primeras fases del desconfinamiento, antes del verano. Las librerías, en cuanto a comercios, pueden seguir abiertas siempre y cuando no tengan una superficie superior a los 800 metros cuadrados.

Protestas del sector

El sector cultural levantó la voz ayer mismo contra las nuevas medidas, tanto a través de las redes como con una concentración delante mismo del Departamento de Cultural. A muchos el anuncio les cogió por "sorpresa", y ha causado incomprensión en la medida que la cultura ha sido recientemente declarada bien esencial.

"Es papel mojado", expresaban ayer un centenar de profesionales de las artes escénicas indignados con la decisión del Govern y convencidos que el cierre tendrá un impacto muy pequeño en la contención del virus. Otros reclamaban medidas económicas "a la altura" para paliar el cierre cultural.

En este sentido, la plataforma Actúa Cultura se sumó más tarde a las reivindicaciones con un comunicado donde pide que que se implementen ya las medidas económicas "paliativas" para hacer frente a la crisis generada por la covid-19 "con la mayor brevedad y con la mayor eficacia".

Por su lado, la consellera de Cultura, Àngels Ponsa, puso en valor también ayer los 17,2 MEUR que el Govern ha aprobado conceder a la Cultura dentro del paquete de ayudas extraordinarias activadas en paralelo a las nuevas restricciones a la movilidad y la interacción social. Sobre las medidas, Ponsa, aseguró que desde su departamento han "luchado hasta el último momento" para minimizar la vez en el sector, pero que los datos sanitarios los han obligado a cerrar actividades.

 

La consellera también se mostró esperanzada de que dentro de quince días se pueda reabrir la actividad cultural. "Nos fijamos este horizonte y los expertos nos dicen que es posible", apuntó.

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