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El juez del Tribunal Supremo Pablo Llarena tiene previsto reactivar las órdenes de detención internacional contra los seis investigados en la causa del ‘procés’ huidos en el extranjero una vez que notifique este viernes los autos de procesamiento, según han señalado fuentes del Alto Tribunal. La resolución del instructor de la Sala Segunda (Penal) afectará al expresidente de la Generalitat, Carles Puigdemont, y a los exconsejeros Antoni Comín, Meritxell Serret, Clara Ponsatí y Lluís Puig, y a la exdiputada y exportavoz parlamentaria de la CUP Anna Gabriel.
El pasado 22 de febrero, Llarena justificó en un acto en Oviedo –la primera y única declaración pública que ha realizado desde que asumió esta causa a finales de octubre– que «la euroorden no ha fallado porque él no la ha cursado», en referencia a que fue su compañera de la Audiencia Nacional Carmen Lamela, primera instructora del caso, quien lo hizo y luego él decidió retirarla el 5 de diciembre para evitar que la Justicia belga entregase a los investigados con menos delitos de los que les imputa: rebelión, sedición y malversación de caudales públicos.
«Las órdenes de detención internacional no deben cursarse por sospechas, sino el día en que se sabe que los hechos tienen indicios racionales de haberse perpetrado. Por lo tanto, el objetivo primero es esclarecer unos hechos y después determinaremos qué procede», aseguró Llarena a los asistentes en aquellas jornadas jurídicas.
Para ello, el juez quiere blindarse no solo con el auto de procesamiento sino admitiendo, esta vez sí, la personación de los huidos en la causa a través de sus abogados. Llarena busca así que las autoridades belgas o suizas (la exconsejera de Educación Clara Ponsatí está dando clases en Escocia) no pongan ninguna pega si los perseguidos alegan falta de garantías.
«Estado plurinacional»
Puigdemont opinó ayer que si España fuera y se reconociera como un Estado plurinacional, Catalunya no buscaría la secesión. «Si en el momento de la creación de la Constitución de 1978, ese concepto ambiguo de nacionalidades que se inscribió en lugar de nación (...) hubiera conducido realmente a un Estado plurinacional, mañana no habría ninguna demanda mayoritaria por la independencia», dijo Puigdemont.
