Un perro policía encuentra entre unas cañas al bebé arrojado al Besòs

El padre del niño está en un centro de internamiento desde el jueves tras confesar los hechos en una comisaría de los Mossos

28 septiembre 2019 11:22 | Actualizado a 30 septiembre 2019 12:07
Se lee en minutos
Participa:
Para guardar el artículo tienes que navegar logueado/a. Puedes iniciar sesión en este enlace.
Comparte en:

Los Mossos d’Esquadra localizaron ayer el cuerpo sin vida del bebé arrojado el pasado martes al río Besòs presuntamente por su padre, un menor de 16 años que ha ingresado en un centro de internamiento, según informó la policía catalana.

El cadáver del bebé fue encontrado en una de las orillas del río, en Sant Adrià del Besòs, a pocos metros de donde el padre fue sorprendido tratando de enterrar al recién nacido, según explicó la responsable del operativo, la intendente de los Mossos d’Esquadra Montse Estruch. Detalló que el cuerpo había sido descubierto alrededor de las 14 horas por uno de los tres perros policía que participaban ayer viernes en el dispositivo. El perro detectó el cadáver escondido en un cañaveral que ya había sido repasado varias veces.

Según la intendente Montse Estruch, el cuerpo «estaba entre las cañas y no era visible porque estaba muy escondido». Ayer viernes se incorporó al dispositivo de búsqueda un grupo especialista en deforestación de los Bombers, y un grupo de montaña de los Mossos, que procedieron a talar y limpiar la zona de cañas.

El dispositivo de búsqueda estaba activo desde el pasado martes y mantenía desplegadas a varias unidades terrestres y acuáticas de los Mossos d’Esquadra, así como a dotaciones de Bomberos de Barcelona –entre ellas un grupo especialista en deforestación–, equipos de Salvamento Marítimo por aire y mar, de la Cruz Roja y de la Guardia Civil, así como a agentes de la Policía Local de Sant Adrià del Besòs.

El dispositivo de búsqueda se activó el martes al trascender el crimen

La responsable del operativo, Montse Estruch, reveló que diversas comisarías de los Mossos habían recibido llamadas de ciudadanos ofreciéndose para colaborar de forma voluntaria en la búsqueda, aunque todas ellas fueron declinadas.

Los hechos sucedieron el pasado 24 de septiembre, cuando un joven de 16 años fue sorprendido por algunas personas cuando se disponía a enterrar al bebé, ya fallecido, junto al Besòs.

Al verse descubierto y según fuentes próximas a la investigación, bajo secreto de sumario, el adolescente lanzó el cadáver al río, pero luego se dirigió a una comisaría de los Mossos, confesó lo ocurrido y fue detenido.

El amplio dispositivo para localizar al niño se puso en marcha después de la llamada de un testigo al teléfono de Emergencias 112 alertando de lo sucedido, que fue luego corroborado también por otras personas. Durante las pesquisas fue encontrada en el lugar una maleta con ropa manchada de sangre.

Por estos hechos, que la Fiscalía ha calificado de asesinato, el juez de guardia decretó el jueves el ingreso el joven en un centro de internamiento de menores como medida cautelar. 

Comentarios
Multimedia Diari