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Cuatro euros por día para cada coche que entre en Barcelona. Es el peaje que diversas entidades proponen para reducir la circulación en la ciudad.
La implantación de un peaje urbano es una propuesta que sobrevuela desde hace años sin que hasta ahora nadie se haya atrevido a aplicarla.
Los argumentos de quienes plantean ese peaje son los de reducir la contaminación y recuperar espacio público. Y quien quiera entrar a la ciudad en coche que pague 4 euros. Piden además que esté implantado en un plazo de dos años.
Exentos
Estarían exentos los vehículos con más de dos ocupantes, autobuses, taxis y trabajadores con rentas bajas que el vehículo forme parte de su trabajo. El resto tendría 10 días al año para acceder a la ciudad sin pasar por caja.
La propuesta sin embargo ya ha encontrado respuesta en el Baix Penedès. El alcalde de Cunit y conseller en el Consell Comarcal del Baix Penedès, Jaume Casañas, señala que los coches de Barcelona también contaminan cuando entran en la veguería del Penedès. «¿Ponemos 20 euros para entrar en la veguería del Penedès?».
Añade que todas las mercancías que entran en Barcelona pasan por territorio de la veguería. «¿Los residuos que genera Barcelona se los quedan ellos?».
Entorno metropolitano real
El peaje urbano para entrar a Barcelona castiga a ese entorno metropolitano en el que está el Baix Penedès donde miles de persona deben desplazarse a diario a trabajar en coche porque el transporte público hacia la capital es insuficiente.
Las entidades que plantean el peaje urbano calculan que podría recuadrase 370 millones al año que se destinarían a la mejora del transporte público. Pero ¿qué transporte público?
«El peaje que pagarían los vecinos del Baix Penedès serviría para mejorar los autobuses y el metro de Barcelona y la comarca seguiría castigada sin una mejora del tren?», pregunta Casañas. «¿El Baix Penedès pagaría la mejora del transporte público de Barcelona?».
La propuesta señala que un 69% de los coches que entran en Barcelona son de localidades con metro o tranvía. El otro 31% requiere soluciones y señalan carriles bus VAO. Pero con ese planteamiento olvidan por completo otra corona metropolitana real como es el Baix Penedès.
El Ayuntamiento de Barcelona ha escuchado la propuesta pero apunta que esa medida obliga a cambios legislativos y un acuerdo con otras administraciones.
Casañas ya pidió una reunión con el Ayuntamiento de Barcelona para exponer que si la capital lo quiere ser de Catalunya debe tener una visión más amplia metropolitana y tener en cuenta la realidad social, urbana y de movilidad.
