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El sábado por la tarde, dos jóvenes con chaqueta y capucha entraron en una pizzería de la calle Sant Antoni de Torredembarra. Cuando llegó su turno pidieron dos pizzas y tras elegir los ingredientes esperaron a que estuvieran listas.
Cuando el trabajador entregó la comanda a los dos jóvenes y les dijo lo que costaban, los clientes se negaron a pagar. Uno de ellos empezó a gritar e insultar y terminó sacando un bastón de madera blandiéndolo en tono amenazador.
El pizzero dejó que se marcharan y seguidamente se llamó a la Policía Local, que recibió la alerta poco después de las 19 horas del sábado. Los agentes tomaron nota de la descripción de los clientes y no se descarta que fueran menores de edad.
La pizzería declinó presentar denuncia contra los dos sospechosos. Los agentes llevaron a cabo una batida por la zona peatonal cercana al negocio, pero no localizó a los dos ladrones.
