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Una mujer de unos treinta años de edad y vecina de Creixell recibió este fin de semana varias palizas de su actual pareja, un hombre de 23 y también residente en la misma localidad. El acusado terminó el lunes por la noche detenido por la Policía Local de Creixell con la ayuda de agentes de Torredembarra. El presunto autor de un delito de violencia doméstica está bajo custodia de Mossos a la espera de que pase a disposición judicial hoy miércoles. El acusado tiene varios antecedentes, dos de ellos vinculados con la violencia de género.
Contusiones por todo el cuerpo
Los hechos se conocieron en la tarde del Lunes de Pascua, cuando la expareja de la víctima fue a su casa para dejarle el niño que tienen y que comparten custodia. La mujer pidió a su ex que la ‘rescatara’ ya que estaba ‘encarcelada’ en su casa y le habían pegado en reiteradas ocasiones.
La expareja avisó de lo ocurrido a la Policía Local, que activó una patrulla para verificar la emergencia. La víctima estaba en casa visiblemente magullada cuando llegaron los agentes y su pareja se había escapado al ver que irían a por él. Fue localizado más tarde con la colaboración de la Policía Local de Torredembarra.
La mujer presentaba golpes en la cabeza, tórax y piernas. Explicó que las agresiones empezaron el sábado por la noche cuando su actual pareja llegó a casa visiblemente ebrio. La paliza se repitió a la mañana siguiente.
La mujer pudo salir de casa y huir, pero el hombre la persiguió y ambos volvieron al interior de la vivienda, donde él la amenazó de continuar agrediéndola si pretendía escaparse de nuevo.
Fue la llegada de su expareja la que propició que el presunto caso de violencia doméstica llegara a oídos de la Policía Loca y se actuara para proteger a la víctima, que tras ser atendida en la misma tarde-noche del lunes en el CAP, presentó denuncia y pidió una orden de alejamiento del acusado.
