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Uno de los grandes proyectos que Vila-seca tiene como ciudad va tomando forma. El Ayuntamiento ha terminado el estudio en profundidad para determinar los futuros equipamientos deportivos de la ciudad. Se trata del Pla Director Esportiu, un documento que pretende «ver dónde estamos, hacia dónde apunta el futuro y ver cómo podemos mejorar», explica la concejal de Urbanisme, Manuela Moya.
El actual Estadi Municipal tiene más de 50 años. Se inauguró en 1967 y durante los primeros años los ciudadanos tenían que atravesar el campo para llegar a las instalaciones pero ahora está completamente integrado con la trama urbana. Aun así, en la zona aún hay mucho terreno municipal que se puede explotar para ampliar los equipamientos. «Habrá un incremento del espacio dedicado a la práctica deportiva», señala Moya.
A raíz de este estudio los técnicos han realizado distintas propuestas. Han planteado tres alternativas. Y la opción B es la que ha generado más consenso entre las entidades deportivas del municipio. El estudio pone de manifiesto que para una ciudad de las dimensiones de Vila-seca un campo de fútbol no es suficiente. En la propuesta se plantea que pueda haber dos nuevos campos y el actual se aprovecharía para competiciones de fútbol siete. Según la concejal de Urbanisme, «tener dos campos de fútbol nos permitirá acoger eventos como el Mundialito, por ejemplo. Hay propuestas muy interesantes».
Entre los dos nuevos campos de fútbol se instalará un cuerpo central de servicio con las graderías de los dos estadios. Allí también se ubicarían los vestuarios. Este proyecto contemplaría también una pista de atletismo homologada para realizar competiciones alrededor del actual campo de fútbol. La que hay actualmente no cumple con la normativa y es solo para entrenamientos. Con lo cual desaparecería el velódromo. El ciclismo sería la única disciplina que en un principio se trasladará al Parc de la Torre d’en Dolça.
En cuanto al tenis, probablemente pasará de haber una a tres pistas. El proyecto contempla que se construyan dos instalaciones para esta disciplina pero el Club Tennis Vila-seca ya ha trasladado al consistorio la necesidad de que sean tres. Además, la propuesta contempla incorporar cuatro pistas polideportivas al aire libre. Y también seis pistas de pádel. Vila-seca no dispone de instalaciones públicas de pádel. Hay pistas privadas en La Pineda y también en el polígono Alba. «Cuando los padres llevan a los niños a fútbol a lo mejor pueden tener la opción de jugar a pádel. Será una forma de conciliar mucho mejor los horarios de padres e hijos», dice Moya.
En el complejo se proyecta también la instalación de un rocódromo, espacios verdes con zonas de juegos infantiles y espacios de streeet workout para hacer ejercicios al aire libre. Se mantendrá el actual acceso al Estadi pero se habilitarán otras entradas y una nueva zona de aparcamiento.
La opción A planteada en el plan director proponía un velódromo homologado –el que hay actualmente no lo es–, en vez de una pista de atletismo que cumpla con la normativa. Mientras que la opción C sugería un circuito de BTT no homologado y una pista de atletismo solo para entrenamientos. Ninguna de estas opciones convenció a las entidades implicadas. La concejal de Urbanisme expone que «es muy interesante que la entidades puedan participar. Siempre nos instalamos fácilmente en la crítica. Cuando tienes que participar en la decisión te das cuenta que todo no puede ser y tienes que decidir».
Ahora el Ayuntamiento trabaja en la licitación de la redacción del proyecto definitivo que recogerá las sugerencias de clubes y entidades. Se espera que a finales del 2019 puedan iniciarse las obras. El Plan Director se presentará a finales de este año a la ciudadanía. El consistorio asegura que será una inversión millonaria. El proyecto se ejecutará por fases para interrumpir lo mínimo posible la práctica deportiva.
