Baix Penedès: Los ecologistas advierten que los matorrales no son son suciedad en el bosque

El sotobosque no es maleza, advierten los ecologistas desde hace años. Pero en muchas intervenciones, que se argumentan como limpieza del bosque, se arrasa con matorrales y especies vegetales que juegan su función, no sólo para el equilibrio medioambiental, sino para permitir la evolución de las zonas forestales.

Hace unas semanas se han realizado intervenciones en zonas forestales de Cunit y La Bisbal del Penedès que los ecologistas señalan que por si intensidad y nada selectivas, retrasarán la posibilidad de la evolución de los bosques de pinos hacia el asentamiento de robles o encinas, mucho más beneficiosos y resistentes a los incendios.

Las intervenciones se explican como preventivas para evitar los incendios y justificadas diciendo que el bosque «está sucio». Pero no en referencia a botellas, plásticos, latas, papeles y todo tipo de residuos, sino indicando que hay matorrales. «Y eso no es un bosque sucio», señala Ricardo Collado, del Grup Ecologista de El Vendrell (Geven).

En este sentido señalan que los clareos del bosque deben ser muy selectivos y no arrasar con todo para dejar jardines con pinos, pero carente de toda una biodiversidad que tiene su papel para las especies vegetales y animales.

Esa mal llamada maleza que los ecologistas critican que se arrase, es un refugio para fauna, favorece la germinación de semillas, fija el nitrógeno y el carbono y mejora la fijación del suelo.

Caminar sin tropezar
Los ecologistas señalan que si en una zona arbolada puede caminarse muchos metros sin tropezar con un matorral y otras plantas, eso no es un bosque. Sería una plantación de pinos como podría serlo de olivos o naranjos, donde las hierbas se retiran para poder trabajar la tierra, pero donde la biodiversidad ambiental es nula.

El intensivo clareo que se ha hecho en Cunit o en el torrente de les Seguerres de La Bisbal ha motivado la alerta de los ecologistas. El Ayuntamiento de La Bisbal explicó que la actuación es para la mejora de la funcionalidad hidráulica y de uso público sobre el torrente.

Favorecer biodiversidad

El Ayuntamiento dijo que «se han limpiado los hábitats forestales, matojos y lugares susceptibles de ser frecuentados por las personas, para reducir el riesgo de incendio y se ha llevado a cabo una restauración ambiental con el objetivo de favorecer la biodiversidad y la diversificación del paisaje».

Pero para los ecologistas se están haciendo unas intervenciones intensivas y nada selectivas. Incluso destacan que un estudio previo debe analizar la funcionalidad de algunos árboles que puedan estar caídos. Hace unos años, una alerta ecologista impidió que en Cunit se realizase una intervención retirando incluso madroños, que es una especie protegida.