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Patrullas de la Policía Local de Cambrils, Mossos d'Esquadra e incluso furgonetas de antidisturbios de la Policía Autonómica tuvieron que rebajar ayer martes por la noche la tensión entre vecinos de Vilafortuny y una familia de cuatro okupas (dos niños adolescentes) que desde el jueves viven de forma ilegal en un chalet del número 28 de la calle Serra de Llaberia.
La convocatoria se organizó a través de las redes sociales y reunió a 60 personas, que cazuela en mano empezaron a "tocar" a las 21 horas como señal de protesta por la presencia de estas personas que desde el mismo jueves día 3 de septiembre se han instalado en la casa de un septuagenario, que no puede entrar en su vivienda.
La protesta fue subiendo de tono y logró que la familia okupa saliera del chalet y se encarara a los manifestantes, que devolvieron su actitud agresiva con aplausos. La "ovación" provocó aún más a la pareja que empezó a mojar con la manguera a los 60 manifestantes que estaban en la calle, enfrente de la vivienda okupada. No solo mojaron sino que tiraron tiestos y empezaron los insultos y las amenazas.
En aquel momento, Mossos y Policía Local intervinieron. mediaron para que la protesta no terminara en pelea y lograron que en una hora la tensión se rebajara y la protesta se diluyera.
La intención de los vecinos es repetir a diario esta acción y por tanto se obligará a activar patrullas de Mossos y Policía Local para evitar el enfrentamiento.
