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El gobierno del Ayuntamiento de Cambrils ha dado el primer paso para atender una de peticiones más reiteradas por los vecinos del barrio de la Llosa. Desde hace años la asociación vecinal reclama una solución para la calle Orquídies, la vía principal de acceso a la zona, que lleva tiempo con el asfalto en mal estado, con baches y con tramos en los que la circulación de vehículos es complicada.
Recientemente el consistorio sacaba a licitación la redacción del proyecto con el objetivo de poder remodelar esta avenida que debía haberse renovado hace muchos años, pero que se paralizó por la crisis económica. El concejal de Urbanisme, Enric Daza, ha confirmado al Diari que el concurso ya se ha adjudicado por 22.571,14 euros, IVA incluido. «Es importante hacer esta obra porque es una avenida por la que no solo pasan los vecinos de la Llosa, sino que es de interés general porque conecta con los barrios de poniente. Los vecinos dicen que es esencial y queremos dar respuesta a esta petición», afirma el edil.
Daza explica que es importante tener este proyecto listo e impulsarlo en cuanto se tenga una cantidad económica disponible, como por ejemplo el remanente de tesorería del que el gobierno dispone cada año. «Somos conscientes de mal estado de la calle Orquídies. No respeta ningún tipo de normativa actual, por ello hemos tenido en cuenta hacer esta licitación y en cuanto podamos iniciar la obra para construir una avenida mucho más extensa hasta la Dorada», señala el concejal.
Además de cómo se transformará la vía, otro aspecto a tener en cuenta es qué ocurrirá con el tramo más estrecho en los conductores se ven obligados a reducir considerablemente la velocidad en el caso de cruzarse con otro vehículo. Cabe recordar que en marzo de 2011 el gobierno de entonces apostó por convertir este tramo que va desde la calle Gervasi Artigues al Camí de les Lloses en sentido único dirección a poniente. Un cambio de circulación que apenas duró un año.
El gobierno actual podría estudiar adoptar una medida parecida para garantizar una mayor seguridad en este punto conflictivo. «Tenemos que estudiarlo con los departamentos de Medi Ambient y Mobilitat. Es una calle que permite recuperar un espacio sostenible, ubicar un carril bici y convertirla en unidireccional en la parte más estrecha. Todavía estamos en una fase muy incial», admite el concejal.
Pequeñas acciones realistas
Daza apuesta por desglosar las fases pendientes de la transformación urbanística de la Llosa y realizar pequeñas actuaciones realistas que garanticen esa mejora. «Cuando me reuní con la asociación de vecinos les expliqué que este mandato habíamos apostado por tres grandes proyectos que están en el PAM (Plan de Actuación Municipal): la Rambla Jaume I y las avenidas de l’Esport y Diputació. Le dije a la presidenta que trabajaríamos en la posibilidad de trocear las fases y hacerlas en proyectos más pequeños y poder avanzar en esta remodelación de la Llosa. Le di mi compromiso de tener este proyecto e impulsarlo en el momento que hubiese disponibilidad», afirma el concejal.
El proyecto de mejora integral del barrio de la Llosa se dividió en tres fases y estaba valorado en 11,1 millones de euros. La primera fase contaba inicialmente con un presupuesto de 5.073.152,22 euros. Se inició en 2008 y finalizó parcialmente en verano de 2010, puesto que se excluyeron los trabajos en la calle Orquídies y el presupuesto se redujo a 3,6 millones de euros. Las fases 2 (3.575.589,83 euros) y 3 (2.466.417,96 euros) no se llegaron a ejecutar. Desde entonces los vecinos no han parado de reclamar al gobierno que impulse la obra.
