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Se habían especializado en robos en instalaciones deportivas de pádel, tenis y golf. Y principalmente en aquellas cuyos clientes tienen un cierto nivel adquisitivo.
La investigación de los Mossos comienza tras un golpe de la banda en el club de padel de Cunit que sufrió un asalto el 23 de enero. A ese robo le siguieron otros en diferentes instalaciones del Camp de Tarragona.
Además de en Cunit los ladrones robaron en clubs de Tarragona, como el Club Tennis Tarragona y Tennis Park, Reus, Segur de Calafell, El Vendrell, Mataró, Sant Feliu de Llobregat, Igualada, Olot, Hostalric, Gurb, Riells, Santa Maria de Montbui y Corbera de Llobregat. En total se les atribuye 29 asaltos.
Aunque su especialidad eran las instalaciones de pádel, tenis y golf, también habían robado en otros equipamientos deportivos municipales, clubs de natación o campos de fútbol.
Los ladrones siempre actuaban de la misma manera. Accedían a los bares de los clubs para robar la recaudación. Además de dinero en efectivo buscaban teléfonos móviles y material que pudiese tener salida en el mercado negro como material deportivo y bebidas alcohólicas.
Los Mossos d’Esquadra llevaban semanas de investigación pero el operativo de detención se precipitó el 28 de junio ya que se supo que los ladrones tenían previsto irse a Rumania al día siguiente. Toda la banda tenía comprados los billetes de avión y autocar.
Los agentes interceptaron un coche en el que iban cinco hombres que acababan de robar en Corbera de Llobregat. En un piso de Santa Coloma de Gramenet se detuvo al jefe de la banda y a su mujer. El hombre enviaba cada día dinero en efectivo a Rumania. En la vivienda se encontró 2.000 euros en efectivo, 20 teléfonos móviles y 40 botellas de licor.
Hay ocho detenidos acusados de 29 robos con fuerza. El juez ha decretado prisión para cuatro y libertad con cargos para el resto.
