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Vecinos y asociaciones animalistas han convocado para hoy sábado una protesta a partir de las cuatro y media de la tarde en las puertas del Ayuntamiento de Calafell por la muerte a tiros ayer viernes de un perro en la urbanización de Valldemar.
Un policía disparó contra el animal, según le versión de los agentes, porque el perro estaba atacando a uno de los policías. El perro murió por los disparos.
Rechazo
El caso ha generado una oleada de quejas de vecinos que niegan la versión de los agentes y señalan que en todo caso debería haberse reducido al animal de otra manera.
La versión oficial del Ayuntamiento es que «los integrantes de la Policía Local han sido atacados por un perro de la raza Rottweiler». Los policías habían acudido a la urbanización de Valldemar avisados por los vecinos ya que el animal estaba suelto por la calle».
Según el Ayuntamiento «se trataba de una situación que se venía repitiendo últimamente». Los dueños del perro viven en una de las casas de la urbanización.
'Defensa propia'
El relato policial explica que en un momento el perro se ha abalanzado contra uno de los policías y su compañero ha abatido al animal con el arma reglamentaria «en un acto de defensa propia».
Sin embargo los vecinos de la zona niegan ese ataque. Reconocen que el perro se había escapado en diferentes ocasiones de la casa y que andaba suelto por calles de la zona. En este punto hay vecinos que señalan que no ofrecía ningún peligro, pero otros explican que el perro les había marcado en ocasiones, por lo que se había avisado a la policía.
El perro, de 13 meses era un macho llamado Shaitan.
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