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Prohibido aparcar de las doce de la noche a las cinco de la madrugada. El solar frente al mar habitualmente usado por decenas de autocaravanas en Cunit ya está lleno de señales que advierten de la restricción horaria de estacionamiento. La medida es para evitar que las autocaravanas pernocten en la zona.
En algunos momentos son hasta un centenar la que pueden verse en ese terreno. El Ayuntamiento argumenta que no está en contra de ese tipo de turismo, pero apunta que se habían detectado situaciones fraudulentas. «Había quien dejaba la autocaravana en la zona todo el verano y la alquilaba por semanas o fines de semana como un privilegiado piso turístico frente al mar sin ningún control», explica el concejal Jaume Casañas.
Para fin de semana
También se había detectado que había quien dejaba la autocaravana aparcada toda la semana en la zona y la usaba para pasar el sábado y domingo. El que hubiese tanta cantidad de vehículos permitía dejarla con cierta tranquilidad ya que de alguna manera estaba vigilada por los autocaravanistas.
El Ayuntamiento ya cerró la entrada de esos vehículos en un terreno anexo al actual colocando barreras de hormigón, pero las autocaravanas se desplazaron unos metros al solar donde ahora están.
Ese solar también es muy utilizado por vecinos que van a buscar el tren para desplazarse a Barcelona y dejan el coche durante el día. Por ello se ha prohibido aparcar en la franja horaria en la que no hay circulación de trenes.
Es una acción directa para las autocaravanas, que ven reducidas a las horas diurnas la posibilidad de estar en la zona. Como la acampada también está prohibida en el municipio (y el que se saque de estos vehículos unas mesas y unas sillas está considerado como acampada) es de hecho una restricción a la estancia de estos vehículos en Cunit.
La colocación de las señales ha sorprendido a autocaravanistas que este jueves estaban en la zona. «La mayoría somos respetuosos y sólo para dormir porque lo que gusta es recorrer lugares», señala Alfred, de Francia. «De no tener un lugar para hacer noche se buscarán otros pueblos».
En la vía pública
La restricción de autocaravanas en ese terreno también puede provocar que algunos vehículos opten por estacionar en la vía pública. Ayer ya podía verse alguno en el paseo marítimo. «Pueden aparcar en las calles pero no pueden sacar ni una silla», advierte Casañas.
El terreno donde ahora se ha prohibido el estacionamiento en horario nocturno es privado, pero el propietario permite que se use como aparcamiento durante el día. El consistorio destaca que ahora es sancionable aparcar en las horas prohibidas.
Buscar un terreno
El Ayuntamiento de Cunit no quiere perder sin embargo un turismo de autocaravanas. De hecho se sumó a la iniciativa impulsada por Enoturisme Penedès para que en toda la comarca haya zonas habilitadas para este tipo de vehículos. El objetivo es que los aficionados a las autocaravanas hagan del Penedès una zona a visitar por su oferta cultural, paisajística y gastronómica.
Pero para ello se necesitan áreas por el territorio que ofrezcan todos los servicios. Para vaciar los depósitos de agua y recargar, tener tomas de corriente y que sean espacios que ofrezcan seguridad para evitar robos y daños.
Consell Comarcal
El Consell Comarcal del Baix Penedès llegó a plantear que los municipios de la comarca estudiasen ubicaciones para crear también una red de zonas adaptadas para este tipo de turismo como ocurre en otras regiones vinícolas de Europa.
El concejal Jaume Casañas asegura que para Cunit «se están estudiando diferentes ubicaciones para crear ese espacio en el municipio». Destaca que para el próximo verano la localidad ya podría disponer de un terreno acotado para las autocaravanas con todos los servicios que necesitas.
No en núcleo urbano
El concejal evita precisar las posibles ubicaciones, pero descarta que sean en zonas céntricas urbanas. Hace unos años se planteó crear ese área de autocaravanas en el terreno que dejaron libres los barracones de la Policía Local cuando el cuerpo se trasladó al edificio del antiguo colegio. Los vecinos de la zona se opusieron ya que temían que hubiese ruidos, humos y un constante movimiento de vehículos.
Además de decidir una posible ubicación para el área de autocaravanas, el Ayuntamiento también debe redactar un reglamento para su funcionamiento que establezca desde las estancias máximas a los servicios que pueden ofrecerse y el coste que pueden tener.
La eliminación de estos vehículos del solar frente al mar también genera un debate vecinal entre quienes consideran que son unos turistas que aportan beneficios para el comercio local y quienes señalan que la imagen de tantos vehículos frente al mar supone un impacto.
