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En la zona de recuperación dunar delimitada en la playa de Cunit hay tramos en los que apenas queda arena. El oleaje ha causado importantes mordidas sin nada que frene la erosión.
Pero también en ese área en recuperación ambiental en la que hace unos años se plantaron especies vegetales autóctonas típicas del ecosistema playa, también hay zonas donde la playa ha resistido los embates de las olas. Las plantas han logrado retener la arena.
Miembros del grupo ecologista Gepec y voluntarios realizaron este domingo una retirada de plantas invasoras como la caña o la bardana común, originaria de América del Norte, pero muy extendida en cauces y riberas y que compite con las especies autóctonas.
Además de esa competencia que desplazada a las especies autóctonas, su contribución para asentar la costa es mínima porque sus raíces crecen en profundidad, a diferencia de las propias como el pasto niño, típica del Mediterráneo y que crece en dunas y arenales.
Ésta última planta extiende sus raíces en forma de amplia red que logra retener la arena cuando el oleaje deposita sedimentos en la costa. Por ellos los voluntarios y miembros de Gepec, además de retirar las especies invasoras, plantaron plantas típicas del ecosistema costero mediteráneo.
La zona en recuperación de Cunit ha tenido un buen efecto para la costa. Incluso se llegó a asentar el chorlitejo patinegro, un ave protegida que sufre una importante regresión por la pérdida de sus ecosistemas naturales costeros. El pájaro llegó a criar en la zona.
Sin huevos
Sin embargo esta temporada todos los huevos que puso se han perdido. Desde el Gepec señalan que puede ser por la entrada de perros a la zona protegida delimitada o porque los hayan devorados predadores como las gaviotas.
En todo caso la recuperación ambiental de la zona ha dado sus frutos permitiendo la expansión de las plantas autóctonas y atrayendo a especies de pájaros. Sin embargo es imprescindible que se respeten los espacios cercados. La zona está ahora junto al nuevo paseo marítimo, por lo que el incremento de paseantes cerca del área protegida hace que incremente su vulnerabilidad.
En este sentido campañas como las realizadas este domingo tienen también el objetivo de concienciar a los vecinos de que las playas tienen una función natural más allá que la de ser arenales para tomar el sol dos meses al año. Los participantes destacaron el que los más pequeños aprendan a ver las playas como algo vivo y natural.
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Es un espacio delimitado en la playa de Cunit con el objetivo de preservar un ecosistema típico del litoral. La recuperación natural de la zona ha permitido que incluso se haya asentado un ave protegida como es el chorlitejo patinegro. Sin embargo, la zona requiere de un mantenimiento para retirar especies invasoras y plantar autóctonas para ayudar a la recuperación.
Baix Penedès, territorio chorlitejo
Las acciones para recuperar espacios naturales en las playas de El Vendrell, Calafell y Cunit, han favorecido el asentamiento del chorlitejo patinegro, un ave protegida. En las desembocaduras de las rieras de La Bisbal en Sant Salvador en El Vendrell y en Cunit ya se han visto parejas que incluso han anidado entre las plantas y las incipientes zonas de dunas.
