Cunit ultima su parque arqueológico para cuestionarse la historia

Cuenta un con un mehir, sepulturas, círculos de piedras y hornos para que los vecinos analicen el por qué de las estructuras

01 mayo 2018 08:27 | Actualizado a 01 mayo 2018 08:38
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El parque arqueológico de Cunit que pretende que los visitantes formulen hipótesis sobre la función de elementos como círculos de piedras, menhires o los hornos, ya está acabado en la zona de La Creueta, junto a la biblioteca.

La iniciativa la impulsa el catedrático de la Universitat de Barcelona Joan Santacana para que «los ciudadanos impulsen el pensamiento analítico». Santacana participó en el libro Y la arqueología llegó al aula.

De un mehir a hornos
En los terrenos se reproduce un menhir, círculos de piedras de tres metros de diámetro, una zanja de horno polinesio, un horno circular, dos sepulturas (de una mujer y de un hombre) y cajas con material de excavaciones. 

Nada de lo montado es original ya que el objetivo no es un museo, sino fomentar el pensamiento analítico. Pretende que el visitante se cuestione sobre la función de esos elementos. Junto a cada uno hay un código QR que responde a las preguntas. 

Reproducciones
Las reproducciones son de piezas halladas en excavaciones y que permanecen en diferentes museos. Así, el menhir es una copia de la Dama de Saint Sernin, en Rouergue.   

Los círculos de piedras son similares a los de Ca N’ Estrada, en Canovelles. Sobre la funcionalidad de estos hay varias teorías. Hay quienes defienden que servirían de bases para cabañas. Pero de ser así faltan evidencias de los agujeros para sostener la cubierta y paredes. 

También hay quien defiende que tenían una funcionalidad ceremonial, religiosa o hacia los astros. Santacana explica que el objetivo es que el visitante se plantee respuestas.

Neolítico
El parque está dedicado al Neolítico, uno de los periodos de la Edad de Piedra. «Arqueología no es educar, pero ayuda al conocimiento metodológico. No se trata de formar a arqueólogos, sino a ciudadanos dotados de pensamiento analítico».

La iniciativa en Cunit ya funciona en diferentes países europeos. A diferencia de los modelos de parque en los que el visitante sólo observa o los temáticos en los que se ofrece tirar con arco o montar en canoa, el de la Creueta pretende la experimentación.

Así, las dos tumbas parecidas a otras encontradas en Catalunya con 6.000 años, deben fomentar el planteamiento de la edad y sexo para quienes fueron construidas.

Las zanjas de seis metros de largo recubiertas de piedras en el interior y bajo troncos quemados muestran que había un fuego intenso y continuo, pero se desconoce cuál sería la función específica. 

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