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Aparentemente eran cajas que contenían balones de fútbol que procedían de Pakistán. Pero la Guardia Civil y la Policía Nacional ya seguían desde hacía tiempo esos envíos por los indicios detectados en una investigación paralela al mismo grupo criminal.
El operativo ha permitido desarticular a una banda de narcotraficantes de origen pakistaní que introducían heroína en España y que tenían una casa en L’Arboç, donde vivían y tenían la base de operaciones.
Empresa pantalla
Empleando como pantalla una empresa de importación de productos deportivos desde Pakistán, los detenidos aprovechaban cajas que contenían 200 balones de fútbol cada una para habilitar artesanalmente en la cara interior del cartón unos espacios donde insertaban bolsas de plástico. Cada bolsita, de ocho por ocho centímetros, contenía 40 gramos de heroína.
La mercancía entraba en España a través del puerto de Barcelona, donde era recogida por integrantes de la banda y trasladada a la vivienda de L’Arboç para recuperarla de su ocultación en las cajas. Una vez manufacturada, en paquetes de un kilo, la heroína se vendía a narcotraficantes de las áreas metropolitanas de Barcelona y Tarragona.
Preparados
El operativo policial ha permitido la aprensión de siete kilos de heroína. Cuatro ya estaban en un coche preparados para la venta. También fueron intervenidos 1.300 euros en metálico y seis teléfonos móviles.
El operativo se ha saldado con cuatro personas que han ingresado en prisión y a quienes se les imputan delitos de pertenencia a organización criminal y contra la salud pública.
