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La actual Junta del Club Marítim Altafulla (CMA), ha requerido al arrendatario de las insttalaciones de bar-restaurante que ajuste su actividad a la descrita en el contrato que tiene actualmente con nuestro Club.
La Junta del CMA expresa su absoluto desacuerdo con las acciones que se han realizado reiteradamente en las pasadas semanas y que han malogrado la imagen de la entidad. Si bien el bar-restaurante pertenece al Club, está gestionado por un concesionario mediante contrato de arrendamiento.
Por todo lo sucedido últimamente se ha requerido al arrendatario que se respeten las medidas de higiene necesarias para garantizar la seguridad tanto de los clientes como de los socios, más en el estado de pandemia en que nos encontramos.
Así mismo, se ha requerido al arrendatario para que respete los horarios de apertura según el contrato y de acuerdo con el que estipula la ordenanza municipal de Altafulla.
Desde el Club queremos manifestar que actitudes como las realizadas en las pasadas semanas no nos representan como entidad y vulneran, en todo momento, el acuerdo contractual con el actual el arrendatario.
Una vez hechos estos requerimientos al actual arrendatario, desde el Club nos reservamos el derecho a tomar medidas más drásticas si estas persisten. Así mismo desde la Junta nos desvinculamos absolutamente de los hechos ocurridos más cuando estos han sido realizados por un tercero y han malogrado parte del buen nombre del Club.
El Club Nàutic d'Altafulla se 'desmelena' en pleno temor a los rebrotes del Covid-19
El responsable del bar-restaurante de la entidad deportiva privada es advertida por el Ayuntamiento ante el descontrol existente en las madrugadas del sábado y domingo. La Policía Local sancionó a algunos de los presentes al incumplir la ordenanza d ecivismo al cierre del local, pasadas las 3 de la madrugada.
