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El Club Nàutic Cambrils inicia la tercera y última fase de las obras de mejora y modernización de sus instalaciones. El proyecto, presupuestado en 1,8 millones de euros, contempla la reforma de distintos edificios para ofrecer un mejor servicio a las socios de la entidad y también a los navegantes que eligen el puerto cambrilense como punto de paso durante sus vacaciones y travesías.
Los primeros trabajos, previstos entre este mes de enero y de junio de 2021, incluyen la reforma del edificio de marinería; de los lavabos de Ribera y de Levante (además de su ampliación en este último caso); el control de acceso de marinería de Ribera; y el acceso al varadero.
Este último punto es una de las apuestas del Nàutic Cambrils con el objetivo de regular el tránsito de los profesionales y dotar de seguridad esa zona, accesible para paseantes y pescadores de caña pese a ser de uso exclusivo para los industriales y personal autorizado.
Al margen de estos trabajos el más importante de esta tercera fase será la reforma integral del emblemático edificio del Barlovento, situado frente a la bocana del puerto y del Faro rojo.
Las mismas dimensiones
La planta baja mantendrá las mismas dimensiones que tiene ahora, aunque se contempla la adaptación y actualización de los espacios para nuevos usos así como también la remodelación tanto de los vestuarios -se diferenciarán los de la escuela de vela y de los transeúntes- como del bar -ganará unos metros en su interior-.
En la parte superior se ubicará, como principal novedad del proyecto, una piscina de nueva creación a la que tendrán derecho únicamente los socios del club y los visitantes náuticos que soliciten el servicio. «Esta inversión nos pone en valor con el turismo náutico y familiar», explica al respecto el presidente de la entidad, Ramon Vallverdú.
Las obras en el Barlovento comenzarán en octubre y se prolongará hasta junio 2021, una vez haya finalizado la temporada estival para minimizar así la afectación de la escuela de la vela y de los arrendatarios del bar. Estaba previsto que se hubieran acometido también ahora, pero se han retrasado porque la pandemia ha afectado tanto en la actividad del club como en sus presupuestos.
Restará para más adelante -en el periodo de octubre de 2021 a junio de 2022-23- la posible remodelación del edificio principal del Club Nàutic Cambrils, situado frente al Passeig Marítim, en base a cómo se reformulen sus usos y también los de las naves que la entidad tiene dentro del varador.
«Queremos reconsiderarlos para que sean más compatibles porque debemos preservar los intereses de los socios, cuyo número va descendiendo progresivamente, y compaginarlos con el turismo náutico que hace un pago por uso pero no por propiedad», añade Vallverdú. La entidad ha reactivado para ello la comisión de obras que integran un grupo de socios.
También en clave de futuro la entidad contempla la externalización de algunos servicios en el varador. «Estamos estudiando cómo licitarlos. Generaríamos especificidades técnicas que ahora mismo no existen en Cambrils y que nos podrían dar un posicionamiento importante dentro del turismo náutico», valora Vallverdú.
Antes de esa tercera fase que arranca ahora el Nàutic Cambrils ya acometió las dos primeras, en las que se remodeló la dársena deportiva y amplió el varador, entre 2018 y julio de 2019, por seis millones de euros financiados también por los propios socios.
Durante la actual pandemia se han seguido realizando diversas actuaciones, aunque menos visibles, en el puerto deportivo. Es el caso de la extracción de una losa, frente a la zona de capitanía, que afectaba las condiciones de navegabilidad en ese punto.
En breve, además, el club estrenará en el varador el nuevo travelift de 150 toneladas y antes de Semana Santa abrirá su restaurante en el edificio principal, que gestionará el grupo cambrilense Fremergy.
