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El Vendrell está entre las localidades catalanas que menos recicla (un 22% de las basuras frente a la media catalana del 40%), lo que supone un encarecimiento de la tasa de basuras que pagan los vecinos ya que por cada tonelada de residuos que se envía al vertedero el Ayuntamiento debe abonar un precio.
Para demostrar lo casi nada que reciclan los vecinos y las ineficientes campañas de concienciación impulsadas desde el Consistorio en los últimos, grupos de voluntarios sacaron de forma aleatoria 20 bolsas de basura de nueve puntos diferentes de El Vendrell para analizar los residios que contenían.
Junto a restos de comida había latas, plásticos y vidrios que deberían haberse separado en casa y depositado en los contenedores correspondientes para ser reciclados. A falta de tener todos los datos, en el control de Coma-ruga se revisaron 52 kilos de basuras y de ellos sólo 2 eran los que deberían haber ido al contenedor gris.
De cobrar a pagar
«El resto debería haberse separado», explica la concejal de Medio Ambiante, Eva Mata. «De heber hecho una separación correcta el Ayuntamiento hubiese pasado de pagar para eliminar esas basuras a cobrar por el aprovechamiento del material».
La iniciativa de vaciar bolsas para mostrar lo mal que recicla en El Vendrell se hizo en plazas y calles. Los vecinos pudieron comprobar como a medida que se vaciaba la bolsa del contenedor, se llenaban otras con material para reciclar con un valor económico.
La concejal apuntó a la necesidad de plantear un sistema de recogida puerta a puerta. Con el sistema, que ya se aplica en muchas ciudades, los vecinos deben lanzar los diferentes tipos de residuos según los días de la semana y además en bolsas que identifiquen a su propietario. De esta manera podrían ser sancionados si mezclan materiales, lo que dificulta su reciclado y afecta a quienes realizan una correcta separación.
Mata destaca que donde se realiza el sistema puerta a puerta se incrementan los niveles de reciclado, lo que contribuye a una mejor gestión de los residuos y que los ciudadanos acaben pagando menos por los recibos.
