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El Ayuntamiento de El Vendrell ha ultimado una ordenanza que este martes debe aprobarse en pleno y que contempla sanciones para los propietarios de solares que los tengan en mal estado.
La ordenanza establece multas para los propietarios de parcelas que estén llenas de matorrales, basura y suciedad y desoigan los requerimientos del consistorio para que las limpien y cierren como ya exige una ordenanza de convivencia ciudadana.
Esta ordenanza sin embargo determina cómo deben conservarse las parcelas, pero no contempla sanciones. También su aplicación es más lenta en el caso de detectar una finca que puede suponer un riesgo para la seguridad o la salud pública.
La nueva
La nueva ordenanza específica de solares fija sanciones para quienes tengan olvidadas sus parcelas. La multa es independiente del procedimiento que realice el Ayuntamiento para buscar al propietario y exigirle la limpieza o en el caso de que no lo haga, que el consistorio realice la tarea a costa del dueño.
Muchos ayuntamientos tienen la dificultad de localizar a los dueños porque la finca ha cambiado de propiedad o era de un banco absorbido por otra entidad. Esa situación hace que los procedimientos para sanear propiedades sean complejos y largos.
Poder acceder
Posteriormente a localizar al propietario, comienza un proceso de requerimientos para instar a la limpieza o que la realice el consistorio a cargo del dueño. Pero para ello es necesaria la autorización de entrada del propietario o de un juez.
Con la ordenanza que se aprobará este martes, al localizar al dueño de una fina que no cumpla las exigencias ya podrá ser multado. En función de la agilidad que tenga para la limpieza, la sanción podrá ser menor.
1.500 solares
El mal estado de muchas parcelas provoca quejas de vecinos que alertan del riesgo de incendio o para la salud ya que se acumulan basuras que atraen a roedores. El Ayuntamiento calcula que en el municipio hay unos 1.500 solares, aunque no todos están en mal estado.
Con la multa directa se espera que los propietarios tengan mayor agilidad para la limpieza. Muchos son entidades bancarias. El alcalde Martí Carnicer señaló que no se va a perdonar a nadie y que los bancos también pagarán. Carnicer señaló que además los grandes tenedores de propiedades pueden ser especialmente penalizados.
Ratas en Calafell
La dificultad de las administraciones locales para acceder a propiedades privadas hace que las soluciones se retrasen muchos meses.
Calafell lo vive desde hace meses. Los vecinos alertan de una plaga de ratas en el núcleo de la playa.
A pesar de que se ha localizado que el nido está en dos casas deshabitadas propiedad de bancos, todavía no ha podido acceder a la finca para una desratización que tampoco realiza el propietario.
El Ayuntamiento de Calafell explica que lograr autorización judicial para acceder a una propiedad privada «puede implicar meses y meses de trámites». Y sin permiso del propietario necesita esa autorización judicial que «no se logra si previamente no se ha agotado una complicada y larga serie de requerimientos a los propietarios».
El alcalde Ramon Ferré explica que «somos conscientes de los problemas que causan los solares o locales sucios, pero no podemos saltarnos la Ley y entrar sin permiso. Estamos atados de pies y manos».
Difícil
Ferré asegura que los jueces «raramente dan permiso de acceso porque haya maleza, restos de obras, ratas o mosquitos sin la tramitación previa si no se trata de un caso extremo». Coincide el concejal de El Vendrell Josep Mercadé que señala que sólo se autorizan intervenciones en casos de emergencia como la amenaza de ruina de una vivienda que esté a punto de hundirse o de un árbol que pueda caer a la vía pública.
