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El Vendrell es una de las zonas de Catalunya donde la pobreza infantil tiene un mayor impacto. La situación de vulnerabilidad de muchas familias hace que los pequeños sean víctimas directas con la amenaza de la exclusión social.
«Es una obligación moral trabajar para evitar esa situación», clama la religiosa Sor Lucía Caram. Porque como sociedad, El Vendrell debe implicarse en erradicar esas situaciones que, en muchas ocasiones tienen la solución en manos de esa propia sociedad y de sus asociaciones.
Tirar adelante
La capital del Baix Penedès participa en el programa Invulnerables, para dar la oportunidad de tirar adelante a familias que sólo necesitan esa ocasión para evitar quedar al margen. El Vendrell es una de las once ciudades catalanas donde estará implantado el programa.
Invulnerables necesita de la implicación de la sociedad. Mucho más de que de las propias administraciones. Inicialmente trabajará con 50 familias previamente seleccionadas por los Servicios Sociales municipales. Sin embargo a medida que las familias superen los riesgos o aumenten los colaboradores en el proyecto, podrán incrementarse.
Iniciativa pública
En Invulnerables deben trabajar la iniciativa pública y la privada para evitar la situación de vulnerabilidad que pueden tener los hijos de esas familias en riesgo. En definitiva el objetivo es igualar las oportunidades de esos niños para normalizar su día a día sin que se vean excluidos de actividades y de sus participación en la sociedad.
Sor Lucía Caram explica que el objetivo principal es conseguir, a través de la educación, que todos los niños y jóvenes tengan las mismas oportunidades. Una de las primera acciones del programa Invulnerables será realizar un encuentro con empresarios del territorio para presentarles el proyecto y la manera que pueden colaborar. Porque un contrato y una oportunidad laboral puede sacar del riesgo a muchas familias.
Entidades
También las entidades asociativas pueden participar abriendo sus puertas y actividades a niños que tendrían difícil acceso. El objetivo es implantar una economía colaborativa en la que cada uno aporte lo que esté dentro de sus posibilidades.
Las familias beneficiadas también asumen el compromiso se proactividad y participación siendo conscientes de los recursos destinados, por lo que también deben participar en los programas de formación y mediación que puedan activarse tanto desde empresas como de las diferentes administraciones.
