El disparo mortal contra un vecino de Miami ocurrió el domingo

Miguel estaba tumbado cuando su vecina entró por la puerta a primera hora de esta mañana. Lo encontró en la cocina, bocabajo. Con la llegada de los Mossos se verificó que tenía un orificio de bala en el tórax.

Su amiga y vecina (los seis adosados están numerados. Miguel vivía en el 5 y su vecina en el 4) tendría llaves de la casa y confianza para entrar o salir de la vivienda si él estaba ausente.

Esta mañana, antes de ir a ver a su marido, ingresado en un centro hospitalario, entró en la casa de Miguel -sus vallas son colindantes- y se encontró con el cadáver, dejándole un mal cuerpo y una sensación de angustia y tristeza enorme el resto del día.

La vecina llamó urgentemente a la Policía Local de Mont-roig del Camp, que poco antes de las 8.45 horas enviaban una patrulla a comprobar la alerta.

El aviso decía que había un hombre muerto dentro de la casa. Los agentes, como fija el protocolo, han perimetrado la escena del crimen y tras verificar que el hombre yacía muerto en el interior, han dejado el caso en manos de los Mossos d'Esquadra, que hasta primera hora de la tarde han registrado minuciosamente esta vivienda situada al final de la avenida València esquina con Príncep d'Espanya.

Información a cuentagotas

Los únicos datos que oficialmente que han confirmado los Mossos d'Esquadra es que la investigación del homicidio la llevan agentes del Área de Investigación Criminal (AIC). El fallecido es un varón de 63 años y de nacionalidad española. El Diari confirmó que su nombre de pila es Miguel y lleva 9 años viviendo en este adosado.

Recibió un disparo en el tórax y se encontró el cadáver bocabajo en la cocina

De hecho, tiene un pequeño huerto con tomates y pimientos y una barbacoa en el jardín con un plato que señala que había actividad a diario en esta vivienda de Miami Platja.  

Una vez los agentes locales han marcado el perímetro de la zona, se han apartado del caso y han dejado que los interrogatorios a los vecinos y la recogida de pruebas lo hiciera esta división especializada de la policía autonómica.

La primera persona con la que han hablado los Mossos es la vecina que ha encontrado el cadáver. Esta tarde, ha declinado hablar con el Diari argumentando que los agentes le han prohibido hacer declaraciones porque el caso está bajo secreto de sumario.

Luego han seguido hablando con otros vecinos, algunos extranjeros, otros residentes e incluso otros de vacaciones desde hace pocos días. De hecho, Si la vecina comparte valla de jardín por un lado, en el otro está una casa que estos días la habitan una familia de Burgos. Entre medio queda el número 6 de estos adosados, que está cerrado y parece que lleva tiempo así.

Uno de estos veraneantes, procedentes de Burgos, explicaba esta tarde de que "el domingo oímos un estruendo y nos extrañó. Somos de fuera y desconocíamos si formaba parte de una fiesta, secuelas de San Juan u otro motivo". Lo cierto es que esta misma versión la han dado otros vecinos más alejados al adosado en cuestión y la teoría que ahora cobra más fuerza es que el disparo mortal podría haber sido este estruendo.

La hora en que fue escuchado fue entre las 14 y las 16 horas de este domingo.

Los signos de criminalidad que tenía la víctima apunta en varias direcciones. Una de las que que cobra fuerza podría ser un ajuste de cuentas, aunque no se descarta el robo violento. La investigación criminal ha durado varias horas, pero no se ha desvelado qué se ha encontrado.

Otras fuentes señalan que la casa no estaría patas arriba, lo que pone en duda de si el motivo del autor del disparo era el robo.

Los vecinos al ver tanta policía esta mañana han pensado que todo el operativo venía motivado por un robo con fuerza, pero al ver el coche de la funeraria, hacla las 14 horas, y al haberles tomado declaración ha quedado confirmado de que se está investigando un homicidio.