El parking de Pacha o la explanada de los cristales (de las ventanillas rotas)

La discoteca más famosa de la Costa Daurada, Pacha La Pineda, siempre tiene aquella letra pequeña que empaña a los que entran a bailar y a pasar una tarde-noche divertida entre música, focos y amistades.

El aparcamiento y las calles y plazas colindantes de esta discoteca en el núcleo turístico de Vila-seca, La Pineda, se convierten en una fuente de problemas para los vecinos y un quebradero de cabeza para las patrullas de Mossos y Policía Local que deben acudir cada vez que el 112 recibe una llamada. Y siempre son un buen puñado.

Este fin de semana, según fuentes policiales, un mínimo de tres coches han resultado dañados. Ventanilla rota, interior revuelto y dinero, gafas o algún otro objeto desaparecido. 

Además de los robos con fuerza en interior de coches, las peleas entre jóvenes, con un exceso de alcohol en sus venas, o el robo de móviles también forma parte del elenco de servicios que las fuerzas de seguridad locales y autonómicas deben dirimir todos los fines de semana.

Tampoco quedan impunes las supuestas agresiones de porteros a los clientes, hechos que en Reus levantaron polvareda por la actuación de un portero a una madre y una hija la noche de Carnaval.