El policía que mató a tiros a un perro en Calafell podría tener que ir a juicio

La defensa pidió el archivo ya que sostiene que el agente actuó en defensa propia

02 junio 2019 10:20 | Actualizado a 04 junio 2019 14:45
Se lee en minutos
Participa:
Para guardar el artículo tienes que navegar logueado/a. Puedes iniciar sesión en este enlace.
Comparte en:

Temas:

El policía local de Calafell que  el pasado enero mató de varios tiros a  un perro de raza rottweiler, sin dueño y que estaba sin bozal, podría tener que sentarse ante el juez por un presunto delito de maltrato animal.

El juzgado de El Vendrell ha dado por finalizada la instrucción. En el escrito de acto de procedimiento abreviado concluye que los hechos imputados al agente, acusado de un delito de maltrato animal, son penalmente relevantes.

Miedo
Con el escrito se abre la puerta a que el agente pueda tener que sentarse ante el juez. A pesar de que en el propio escrito destaca que el policía actuó llevado por el «miedo» a causa de «la agresividad desmesurada» del animal.

Aquel día una patrulla de agentes acudió a la calle Empuries porque un vecino avisó de que tenía miedo de salir a la calle ya que el animal, de nombre Shaitan,estaba suelto. No era la primera vez que la Policía Local había acudido a la zona por denuncias de que animal iba suelto por la calle

Agresividad desmesurada
El escrito del juez destaca que el agente realizó cinco disparos que causaron la muerte rápida del perro. El policía declaró en un primer momento que el perro le atacó  con una «agresividad desmesurada» por lo que disparó en defensa propia.

De hecho la defensa del policía pidió el archivo del caso ya que la actuación del agente estaba «más que justificada» ya que había una «evidente situación de peligro» para su integridad física y su vida y que disparó porque «no tuvo más remedio» para evitar «un mal mayor».

La muerte del perro levantó una gran reacción en Calafell e incluso el partido Pacma organizó una manifestación de protesta. Coincidió además que ocurrió pocos días después de la muerte de otro perro en Barcelona por un disparo de la Guardia Urbana.

Sin embargo también muchos vecinos defendieron al agente. Destacaron que había demostrado en reiteradas ocasiones su dedicación a los animales, por lo que dieron por bueno el argumento del ataque y la defensa propia.

Sin dueño
El animal abatido residía en una casa okupada, pero cuando los agentes acudieron a la zona tras la muerte del animal nadie se presentó como el dueño. El perro tampoco estaba censado ni tenía chip identificador.

 

Los hechos ocurrieron cuando al llegar los agentes a la zona se dirigieron a la casa quien consideraban propietaria del animal. No había nadie y en ese momento el perro se abalanzó sobre el agente, según el relato del policía.

La porra
El perro saltó con un «evidente estado de agresividad intentando morder las piernas» al policía, según el juez, que subraya que el agente lo pudo evitar inicialmente utilizando su porra, sin golpear el animal. No obstante, como el perro «no desistía en su afán», según reconoce el juez, el agente no tenía bastante con la porra para defenderse, por lo que tuvo que retroceder unos metros hasta llegar a la altura del domicilio del vecino que había llamado a la policía.

Con el agente cada vez más nervioso por la situación, según el acto, el perro hacia el vehículo policial, donde había otro policía, momento en que el investigado pudo sacar su arma reglamentaria.

El perro hizo marcha atrás y se dirigió de nuevo hacia el policía investigado, a quien acosó contra la pared, de manera que, «creyendo que podía morder por la agresividad desmesurada que mostraba, efectuó cinco disparos», tres de los cuales impactaron en el animal causándole «una muerte rápida», según sostiene el juez.

En su escrito, el juez admite, como alega la defensa, que no existía ningún protocolo en la policía local de Calafell sobre cómo intervenir delante perros peligrosos en la vía pública ni que recibieran ningún tipo de formación específica, a pesar de lo cual los propios policías requirieron la presencia de una protectora, que llegó cuando el perro ya estaba muerto.

La asociación de Abogados en Defensa Animal de Tarragona (ADAT) denunció al policía por un delito de maltrato animal.

De baja
El agente tuvo que ser asistido en el servicio de urgencias  y  se le diagnosticó ansiedad y estuvo de baja laboral por la situación de «shock, agonía y estrés». Para la defensa, llevar a juicio al policía por este caso, en el que considera que no existen indicios de delito, supondría someterlo «de manera ilógica a la pena del banquillo de los acusados».

Noticias relacionadas:

El agente recibió amenazashttps://www.diaridetarragona.com/costa/Denunciaran-las-amenazas-al-policia-de-Calafell-que-mato-al-perro-20190116-0049.html

La Policía Local mata a tiros al perrohttps://www.diaridetarragona.com/costa/La-Policia-Local-de-Calafell-mata-a-tiros-a-un-perro-de-raza-Rottweiler-20190111-0081.html

Denunciarán al Ayuntamiento por la muerte del perrohttps://www.diaridetarragona.com/costa/Denunciaran-al-Ayuntamiento-de-Calafell-por-la-muerte-de-un-perro-a-tiros-de-la-policia-20190112-0040.html

El Ayuntamiento denuncia al dueñohttps://www.diaridetarragona.com/costa/El-Ayuntamiento-de-Calafell-denuncia-al-dueno-del-perro-muerto-a-tiros-de-la-policia-20190113-0011.html

Denuncian a los policíashttps://www.diaridetarragona.com/costa/Denuncian-a-los-policias-de-Calafell-implicados-en-la-muerte-del-perro-20190114-0040.html

Comentarios
Multimedia Diari