Hacía tiempo que se sospechaba de una caseta prefabricada de unos 25 metros cuadrados situada en una de las zonas rurales de la ciudad. Las conexiones eléctricas y su ubicación levantaban sospechas a los policías que habían investigado su aparición.
Este lunes, se decidió actuar. La Policía Local irrumpió en la finca, abrió la caseta prefabricada y verificó la existencia de una plantación de unas 35-40 plantas en diferentes fases de crecimiento.
Se decomisaron las plantas y material para su cultivo. No sólo actuó la Policía Local. También se personaron técnicos de Endesa para cortar el suministro eléctrico, que tras una inspección ocular de los mismos se verificó que era un enganche ilegal.
Las cinco personas investigadas se les imputa de momento un delito contra la salud pública y otro de defraudación de fluído eléctrico.