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Un hombre de 65 años de edad y vecino de Roda de Berà ha fallecido estas últimas horas y ha aparecido su cadáver en el agua dentro del puerto de la localidad.
Ha sido el marinero que hace la ronda cada mañana quién lo ha avistado poco antes de las 7.30 horas. El marinero empieza la ronda a las 6 y revisa amarres y la lámina de agua. En este recorrido ha avistado el cuerpo inerte del hombre flotando cerca de la lancha motora de su propiedad.
El marinero ha avisado al 112 y a los responsables del puerto. Se ha activado la Policía Judicial de la Guardia Civil, quien se ha hecho cargo del caso. En un principio, el cuerpo no presenta lesiones compatibles con una muerte violenta, pero hasta la autopsia no se podrá precisar la causa, señalan fuentes de la investigación.
El hombre podría haber caído al agua a la hora de cenar. Vivía en una embarcación en el puerto y había realizado algunos trabajos en el varadero. Se trata de un lobo de mar (hombre dedicado toda la vida a labores dedicadas al mar), de origen vasco, que había pasado toda su vida enrolado y que desde hacía unos pocos años había terminado en Roda de Berà, donde compró una motora antigua y se la reparó convirtiéndola en su morada.
La hipótesis de un accidente estaría entre las más probables al no hallar signos de violencia en el cuerpo, que se ha sacado del agua y se ha llevado al tanatorio para la autopsia.
Fuentes conocedoras del caso señalan que el hombre no tenía raíces en Roda de Berà y que se desconoce si tiene algún pariente en Bermeo, localidad de Euskadi donde nació.
