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El Ayuntamiento de Cambrils ha celebrado este martes por la mañana su primera sesión plenaria bajo las órdenes del nuevo alcalde, Oliver Klein. Una de las curiosidades más destacadas de este pleno extraordinario ha sido el regreso de la bandera española a la sala de plenos, una insignia que solo había estado presente una vez en la historia del edificio inaugurado en 1995.
Con la presencia del PP y Ciutadans en el gobierno, todo indica que la bandera no se tocará hasta finales de este mandato, en mayo de 2023. A lo largo de estos más de 25 años del edificio del ayuntamiento -antes estaba en la plaza de la Vila- solo ha habido una ocasión en la que la bandera española ha visitado el pleno. Fue en el pleno de despedida del mandato 2011-2015 cuando el concejal del PP, David Chatelain, encontró la enseña en una de las salas contiguas a la sala y la recuperó para presidir esta sesión.
Con la llegada de Mendoza al consistorio, la bandera volvió a esconderse pero la petición de que volviera a estar presente vino de la mano del entonces portavoz de Ciutadans, Imanol Rico, que en varias sesiones reivindicó la insignia.
En este primer pleno de Klein como alcalde ya se ha podido ver la nueva distribución de los concejales. En la parte central de la mesa estaba el líder del Nou Moviment Ciutadà y a su lado los portavoces del PSC -Ana López-, Cs -Juan Carlos Romera- y NMC -Enric Daza-. En uno de los laterales de la mesa estaba la concejal no adscrita Patricia de Miguel, el portavoz de Junts per Cambrils -Lluís Abella- y la portavoz de ERC -Camí Mendoza-; y al otro lado, el portavoz del PP -David Chatelain-, el concejal no adscrito Joan M. Artigau y el interventor y la secretaria.
Una sesión tensa en la que los reproches han marcado buena parte de las exposiciones de los partidos de la oposición, que han cuestionado las maneras de hacer de Klein y de sus compañeros de gobierno.
