La barandilla del nuevo puente de la antigua N-340 tiene los días contados

Desde que se abriera al tráfico a finales de junio, el nuevo puente de la antigua N-340 no ha parado de generar críticas por parte de los usuarios que pasan cada día por este tramo. La señalización y la falta de visibilidad por la barandilla roja ha hecho que los técnicos del Ayuntamiento de Cambrils se pongan manos a la obra para solucionar un paso que muchos cambrilenses consideran como un punto negro. 
En la última sesión plenaria, el concejal de Serveis, Espai Públic i Medi Ambient, Antonio Laguna, confirmó que los especialistas han encontrado una solución para mejorar la visibilidad y seguridad del puente con la sustitución de la baranda. «Este tema lo tenemos prácticamente solventado, a ver si podemos materializar la propuesta y solucionar el problema», apuntó el edil. 

La polémica surgió días después de abrirse la circulación. Los conductores detectaron que el elemento, que tiene los barrotes muy juntos, les dificultaba poder ver con claridad si había un coche cruzando el puente, tanto en el cruce de la avinguda Baix Camp con el passeig La Salle como en la avinguda Adelaida. Por ello, algunas personas reclamaron la instalación de semáforos. 

En su momento, el concejal explicó que «la nueva normativa es más restrictiva» y se había optado por una barandilla que no fuera escalable. Pero a raíz de las quejas recibidas, los técnicos comprobaron que la tipología de esta estructura no ayudaba a la hora de circular por el puente y empezaron a estudiar una alternativa para mejorar la visión de los conductores y evitar accidentes. 

En el pleno, Laguna también hizo un llamamiento al civismo cuando los usuarios circulen por el puente, ya que se ha detectado que algunos no respetan la velocidad ni la señalización de un tramo en el que ya habido más de un choque. «Verdaderamente hay gente que corre mucho y hemos trasladado a los técnicos que busquen una solución. Me consta que ya están trabajando», aseguró el concejal. 

Trabajos pendientes

Cabe recordar que la obra todavía no está acabada. En septiembre del año pasado, la empresa Romà Infraestructures i Serveis empezó los trabajos de la primera y la segunda fase del proyecto por un importe de 959.014,87 euros. La compañía se centró en la demolición del puente, la construcción de la nueva plataforma y la urbanización parcial de la avinguda Baix Camp.

El gobierno decidió abrir la circulación en verano para evitar que se produjeran retenciones en las principales vías de acceso y salida del municipio en plena temporada turística. Ante las críticas de los usuarios, Laguna apuntó que está previsto que el proyecto finalice antes de fin de año. «Esta obra quedará bien cuando esté acabada la parte de levante, que es una de las más importantes», señaló. 

En junio, el gobierno sacó a licitación la tercera fase por un importe de 209.135,93 euros. Esta parte corresponde a la pavimentación del nuevo paseo de seis metros de ancho, los trabajos de ajardinamiento, los parterres laterales de la avinguda Baix Camp y la instalación del alumbrado público. 

Por otro lado, la última fase, que se incluyó este mismo año en el proyecto, consistirá en la urbanización de la avinguda Baix Camp, en el trozo que va desde la avinguda Adelaida hasta el Camí de la Creu, donde estaba situado el antiguo Lidl. Este parte tiene un presupuesto de ejecución de 87.742,21 euros y servirá para unir el puente con el paseo que se inauguró en 2011, que tiene el nombre de avinguda Nova Augusta. 

Con estos trabajos realizados, el paseo presentará un aspecto completamente renovado y mucho más seguro, ya que la señalización y las rotondas estarán mejor indicadas. 

Nuevo Mercadona

El gobierno también está pendiente que se urbanice el descampado que hay justo en la avinguda Adelaida con Nova Augusta, que funciona como aparcamiento, y donde está previsto que se instale un nuevo Mercadona. Hace unas semanas, el concejal de Urbanisme, Joan Maria Artigau, explicó que las obras del hipermercado se han retrasado por los trámites urbanísticos que deben cumplir antes de iniciar la construcción. La previsión es que la superficie comercial abra hacia finales de 2019. 

Los propietarios de la superficie comercial también se encargarán de realizar el carril que falta en la avinguda Adelaida, así como la urbanización de la zona. En las próximas semanas se presentará este proyecto con el que se finalizará la remodelación de la rambla que está situada en la entrada al municipio. Además, en el solar ubicado en la zona dels Antigons se habilitará un parking disuasorio por un periodo mínimo de dos años.