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Los Mossos d’Esquadra han abierto una investigación para intentar determinar las causas del incendio que en la madrugada de hoy ha arrasado un bazar chino en Cunit y obligado a desalojar viviendas de los edificios anexos.
Algunos vecinos explican que vieron un pequeño fuego en el exterior del local antes de que el establecimiento quedase envuelto en llamas. La gran cantidad de material, principalmente plástico, pero también de pinturas y productos inflamable generó un pavoroso incendio con grandes llamas.
La investigación intenta determinar si las llamas comenzaron en el interior del local o en el exterior. La virulencia del fuego, que ha arrasado el bazar, dificulta la investigación.
Desalojos
Las llamas comenzaron sobre la una de la madrugada. El teléfono 112 de emergencias recibió hasta 35 llamadas en los primeros minutos. Fueron patrullas de la Policía Local quienes primero llegaron a la zona y coordinaron las actuaciones iniciales.
Pero los vecinos de los edificios anexos ya habían decidido salir a la calle por la densa humareda, las intensas llamas y las deflagraciones que se escuchaban en el interior del local.
Siete dotaciones de bomberos, además del Servei d’Emergències Mèdiques (SEM), Mossos d’Esquadra y el equipo de investigación llegaron a la zona.
Humeando
Los vecinos que salieron de sus casas fueron alojados en viviendas de amigos y familiares y a otros el Ayuntamiento los alojó en un hotel de la localidad. Tras una noche de nervios y miedo al ver la intensidad de las llamas junto a sus casas, los vecinos a primera hora vieron como el fuego estaba apagado, pero el bazar seguía humeando con intensidad.
La primera inspección del arquitecto municipal es que el edificio anexo al bazar no ha sufrido daños estructurales. Sin embargo sólo los propietarios de seis pisos pueden volver a ocuparlos.
Cañerías deshechas
Cuatro viviendas no pueden ocuparse ya que las altas temperaturas han fundido canalizaciones, desagües y bajantes. No obstante tras una primera limpieza del bazar volverá a hacerse un estudio de la estructura del edificio.
Joan Anton, uno de los vecinos desalojados explica como la intensidad del calor ha fundido cañerías e incluso ha levantado las baldosas de algunos pisos y desencajado puertas y ventanas.
El bazar ha quedado vallado para evitar daños, pero la entidad bancaria anexa podrá abrir mañana con normalidad. El regreso de los vecinos a sus casas irá para largo y dependerá de las compañías de seguros. El Ayuntamiento señala que intentará que se agilicen las tramitaciones.
